Roma, 16 sep (.).- El ministro español de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, abogó hoy en Florencia, donde se reúnen sus homólogos del G20, por el regadío sostenible como el sistema de producción que puede satisfacer las necesidades de alimentos en el mundo, según una nota de su ministerio.
En este sentido, consideró urgente la aplicación de métodos innovadores que permitan un aprovechamiento sostenible del agua y que garanticen una agricultura capaz de alimentar a la población.
Los ministros de Agricultura del G20 celebrarán su reunión en Florencia mañana y el sábado, pero ya este jueves hubo una primera sesión de un foro sobre agricultura sostenible, todo bajo la presidencia de turno de Italia.
España no forma parte del G20, pero es país invitado y por eso Planas ha viajado hasta Florencia, donde ha defendido la innovación científica y tecnológica como palanca que permita encontrar soluciones para desarrollar sistemas alimentarios sostenibles, productivos y socialmente justos.
Ha argumentado que el objetivo de alimentar el planeta solo será posible con una agricultura sostenible basada en un regadío adaptado a las nuevas circunstancias, de precisión y digitalizado, que garantice el ahorro de agua y energía y aplique fertilizantes y fitosanitarios de forma eficiente y sostenible sin perjudicar a la rentabilidad de las explotaciones.
Y ha explicado que en las zonas de España donde se ha implantado regadío se ha multiplicado por seis la productividad agrícola, se ha aumentado hasta cuatro veces la renta de los agricultores y se genera tres veces más de empleo.
En este sentido, ha señalado que el regadío representa el 22,5 % de la superficie cultivada en España, pero en ella se genera el 65 % de la producción final agrícola, lo que lo convierte en la "joya de la corona" del sistema agroalimentario español.
En las reuniones de este jueves también ha participado el comisario europeo de Agricultura, Janusz Wojciechowski, quien ha advertido de la necesidad de que los países europeos desarrollen políticas de control para evitar conflictos de interés en la gestión de los fondos de la Política Agrícola Común de la Unión Europea.
La presidencia italiana ha fijado tres objetivos para la reunión del G20 de Agricultura en Florencia: sostenibilidad y resistencia de los sistemas agroalimentarios, contribución a la agricultura de los países rezagados con respecto al objetivo del hambre cero y también participación del G20 el debate preparatorio de la Cumbre Alimentaria de la ONU.
Esta cumbre ministerial se celebrará en el Palazzo Vecchio de Florencia y el viernes 17 tendrá tres sesiones de trabajo, mientras que el sábado 18 habrá otras dos.
Al término, está previsto que el ministro italiano de Políticas Agrícolas, Alimentarias y Forestales, Stefano Patuanelli, resuma los avances en una rueda de prensa y se publique, en caso de que la haya, una declaración final.