Por Jesús Aguado
MADRID (Reuters) - Banco Popular (MC:POP) registró un descenso de sus resultados principales a septiembre en un entorno de deterioro de márgenes y elevada mora y baja rentabilidad.
El beneficio neto a septiembre cayó un 8 por ciento a 278 millones de euros, mientras que en el tercer trimestre el descenso interanual fue del 28,9 por ciento a 90 millones ante una comparativa desfavorable por elevados extraordinarios en el mismo trimestre de 2014.
Ambas cifras estuvieron en línea con las previsiones, al igual que el margen de intereses -la diferencia entre lo que un banco cobra por prestar y sus costes de financiación-, que bajó en el acumulado un 4,2 por ciento a 1.686 millones, aunque en el tercer trimestre frenó este descenso.
La evolución de las principales partidas está en línea con lo esperado por el banco, que indicó por boca de su consejero delegado, Francisco Gómez, que mantiene su previsión de cerrar 2015 con un beneficio de 400 millones.
Las acciones de Banco Popular caían un 1,2 por ciento, en línea con el mercado.
BANCO MALO
El banco, el de mayor exposición al ladrillo y a los impagos hipotecarios, estudia la alternativa de crear un "banco malo" propio con activos inmobiliarios, aunque Gómez señaló que el análisis está en "fase incipiente", reiterando su meta de vender 2.000 millones de euros en inmuebles en 2015.
El directivo añadió que el banco no tiene intención de retirar las cláusulas suelo en el corto plazo, pese a una recomendación de Bruselas de devolver todo el dinero cobrado por las mismas.
Gómez defendió el haberlas comercializado con transparencia e hizo referencia a la sentencia de mayo del Tribunal Supremo, que estipulaba que los usuarios sólo podrían recuperar el dinero destinado a este concepto a partir de mayo de 2013.
La tasa de mora, una de las más altas de la banca, se situó al finalizar septiembre en el 13,12 por ciento frente al 13,24 por ciento de finales del primer semestre.
ABIERTO A FUSIONES
En un momento en el que la búsqueda de rentabilidad alienta las expectativas de nuevas fusiones en el sector financiero, Popular sigue abierto a operaciones, aunque no a cualquier precio.
"Popular estudiará cualquier posibilidad de integración, creemos que es responsabilidad del equipo directivo hacerlo así. (Pero ponemos dos condiciones), que seamos líderes en esta integración, (...) y que esa integración sea muy favorable para el accionista actual de Popular", indicó.
El banco, en el punto de mira de los mercados por su relativa baja rentabilidad, redujo el retorno de capital al 2,91 por ciento frente al 2,94 por ciento de junio.