Lisboa, 10 mar (.).- Portugal está preparando una tarifa social para facilitar el acceso a internet, que tendrá criterios similares a los que ya se anuncian para la electricidad y el agua y que se pondrá en marcha en el segundo semestre de este año.
"La idea es que el 1 de julio esté disponible", explicó este miércoles el secretario de Estado de Transición Digital, André de Aragão Azevedo, durante una audición en el Parlamento, donde reconoció que el proceso se ha alargado más de lo previsto por la pandemia y la transposición de una directiva europea de telecomunicaciones.
Aunque todavía no se conoce exactamente quién podrá acceder a esta medida, que permitirá descuentos en la factura de internet, el secretario confirmó que la idea es utilizar criterios semejantes a los que ya se aplican a las tarifas sociales de luz y agua.
La norma que regulará esta tarifa está "muy adelantada", aseguró Aragão Azevedo, que señaló que se trata de una medida "estratégica y muy relevante" porque no se puede dejar fuera de la digitalización a alguien por razones económicas.
En Portugal, el 82 % de los hogares tienen internet de banda ancha y el 18 % de la población nunca ha accedido a internet, según datos del Eurostat.
Portugal cuenta con tarifas sociales de electricidad y de gas a las que pueden acceder personas con contratos de baja tensión que reciben subsidios o cuyos ingresos anuales no superan los 5.808 euros, a lo que se suma un 50 % por cada miembro de la familia que no tiene ingresos.
Suponen un descuento del 33,8 % respecto a los precios de referencia del mercado regulado en el caso de la luz y del 31,2 % en el del gas.
También hay una tarifa social para el agua que depende de los ayuntamientos, que establecen los escalones de ingresos máximos que puede tener una familia para acceder a la medida y los descuentos que se aplican.