Praga, 17 may (.).- La República Checa y Austria han acordado este martes en Praga aumentar -aunque sin precisar el monto de las inversiones- la capacidad del oleoducto transalpino TAL, que bombea cada año 40 millones de toneladas desde la ciudad italiana de Trieste hasta Alemania.
República Checa ve en esta ampliación de la capacidad del conducto transalpino una solución si, "por cualquier motivo, el petróleo ruso no puede ser utilizado", dijo el primer ministro checo a la cadena pública CT24 tras reunirse con el canciller austríaco, Karl Nehammer.
Mientras se discute en la Unión Europea un embargo al crudo ruso dentro de las nuevas sanciones contra Moscú por la invasión de Ucrania, Praga ha pedido al Gobierno austríaco que le apoye para aumentar la capacidad del TAL en unos 6 millones de toneladas y reducir así la dependencia del combustible ruso.
El oleoducto TAL está gestionado por un consorcio de tres empresas -italiana, austríaca y alemana- en las que participan a su vez como inversores grandes empresas petrolíferas, incluida la entidad checa MERO.
Los ministros de Exteriores de la UE, sin embargo, no lograron que Hungría levante su veto a una reducción gradual de las importaciones de petróleo de Rusia.
Del total de las importaciones checas de crudo en 2021, que ascendieron a casi 7 millones de toneladas, el 49 % fue adquirido a Rusia, que lo bombeó a través del oleoducto Druzba que atraviesa Ucrania.
El 51 % del combustible fósil restante llegó a través del TAL, al que los checos están conectados por el oleoducto IKL, según datos del Ministerio de Industria y Comercio.
En cuanto al gas natural, donde Austria y República Checa son muy dependientes de Rusia, Fiala y Nehammer también acordaron cooperar con países que quieren aumentar su capacidad o construir terminales de gas licuado (LNG), también para reducir la dependencia del gas natural ruso.