Tokio, 23 dic (.).- El primer ministro japonés, Fumio Kishida, hizo un llamamiento este jueves a las empresas para que suban los salarios en 2022 al menos un 3 %, una petición que tiene lugar de cara a las negociaciones laborales de principios de año.
"Es importante que muchas empresas suban los salarios de forma conjunta", dijo el jefe de Gobierno nipón durante una reunión con representantes de la principal patronal del país, Keidanren, recogida por la agencia de noticias Jiji.
"Distribuir la riqueza aumentando los salarios es invertir en el futuro", señaló Kishida, que ha erigido la redistribución de la riqueza del país como uno de los pilares de su estrategia económica para establecer lo que denomina un "nuevo capitalismo".
Kishida, que llegó al cargo el pasado mes de octubre, considera que la subida salarial es un factor clave y ha pedido un incremento de al menos el 3 % entre las empresas cuyas ganancias se hayan recuperado a niveles previos a la pandemia de la covid-19.
La principal patronal japonesa se muestra, por su parte, reticente a pedir un aumento salarial generalizado o a establecer un objetivo numérico, y ha destacado la importancia de que cada empresa considere qué subida es la que puede permitirse en el contexto actual.
Las grandes empresas manufactureras del país han experimentado una recuperación más rápida que las no manufactureras, especialmente las del sector servicios, duramente afectadas por la pandemia.
En las negociaciones salariales de este ejercicio, que concluirá a finales de marzo de 2022, las empresas niponas accedieron a un aumento salarial promedio del 1,78 %, según la Confederación de Sindicatos del Japón, conocida como Rengo.
Se espera que Keidanren elabore unas directrices para sus empresas miembro en enero, antes de que comiencen las negociaciones entre las empresas y los sindicatos en el año entrante.
La incertidumbre sobre la variante ómicron, los problemas globales en las cadenas de suministro y el encarecimiento de las materias primas han hecho que las empresas se muestran más cautelosas sobre el proceso de recuperación.
El gobernador del Banco de Japón (BoJ), Haruhiko Kuroda, que también estuvo presente en la reunión, indicó que se espera que la recuperación en Japón sea más "evidente" el próximo año, con la esperada disminución de la presión de la pandemia y la adopción de nuevos estímulos por parte del Gobierno.
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