San Juan, 13 oct (EFE).- Puerto Rico dará de nuevo la próxima semana explicaciones a los analistas de Wall Street sobre su situación financiera y sus planes de crecimiento para tratar de calmar al mercado, que ve con recelo la gran cantidad de deuda emitida por la isla en forma de bonos municipales.
El presidente del Banco Gubernamental de Fomento de Puerto Rico, José Pagán Beauchamp, encabezará el próximo 15 de octubre una teleconferencia con analistas e inversionistas para actualizar información sobre la actividad económica y fiscal de la isla caribeña.
"Puerto Rico continúa implantando medidas significativas a fin de fortalecer nuestra situación fiscal y estimular el crecimiento económico", destaca Pagán Beauchamp en la convocatoria de la reunión.
Puerto Rico acumula una deuda de unos 87.000 millones de dólares, de los que cerca de 70.000 millones son en forma de bonos municipales, cuyo precio está cayendo con fuerza en los mercados, ante la sensación de los inversores de que la situación económica y financiera de la isla puede hacer peligrar su cobro.
Recientemente la agencia de calificación Moody's bajó de Aa3 a A2 la nota de la deuda de la Corporación del Fondo de Interés Apremiante (COFINA) de Puerto Rico, creada para financiar el pago o cancelación de ciertas obligaciones de deuda pública.
El Gobierno de Puerto Rico necesita 2.043 millones de dólares para equilibrar sus cuentas públicas (1.223 para deudas de años anteriores y 820 para cuadrar el presupuesto del año fiscal 2014) y pretender hacerlo ampliando la capacidad de emisión de bonos de COFINA.
Moody's mantiene en Baa3 (nivel previo al bono basura) la calificación para las obligaciones generales del Gobierno puertorriqueño y, al igual que para COFINA, la perspectiva es negativa, debido a la "débil" situación de la economía de la isla caribeña, la caída en la recaudación de impuestos y la progresiva emisión de deuda.
En cualquier caso, reconoce los esfuerzos del Ejecutivo que encabeza el gobernador Alejandro García Padilla, que esta semana ya viajó a Wall Street para ofrecer explicaciones sobre la situación financiera de la isla y sus planes para enderezar una economía que lleva siete años en recesión. EFE