Geoffrey Smith
Investing.com - Es un miserable Manic Monday para las acciones de las aerolíneas en toda Europa debido a un triple golpe de malas noticias de Francia, Alemania y el Reino Unido.
La mayor perdedora al comienzo de la jornada ha sido Air France-KLM (PA:AIRF), que cayó nada menos que un 8,4% tras conocerse que irá al rescate de la aerolínea en bancarrota Aigle Azur. EasyJet, que también había pujado por Aigle Azur, ha caído un 3,2%.
La noticia amenaza con repetir —aunque a menor escala—el fiasco de Air Berlin (DE:AB1) de hace dos años, cuando las aerolíneas de Europa perdieron una oportunidad de oro para resolver sus problemas de sobrecapacidad en el segmento de los viajes de corto recorrido, y en cambio se repartieron entre ellos los activos de los operadores en un intento de obtener cuota de mercado.
Al igual que ocurriera en el episodio con Air Berlin (DE:AB1), existe la sospecha de que el Gobierno se apoyará en el campeón nacional local (entonces Berlín y Lufthansa (DE:LHAG); ahora París y Air France-KLM (PA:AIRF)) para llegar a una solución que minimice la pérdida de puestos de trabajo.
El momento del informe es desafortunado, en cualquier caso. Air France-KLM (PA:AIRF) ha publicado unas decepcionantes cifras sobre el tráfico de agosto, mostrando la ralentización económica que atraviesa su negocio.
El número de pasajeros transportados por el grupo franco-holandés aumentó sólo un 1% con respecto al año anterior. En los primeros siete meses del año, aumentó un 3,2%. El aumento de pasajeros ya no va acorde con el crecimiento de la capacidad de AF-KLM: la disponibilidad de asientos por kilómetros ha aumentado un 1,6%. En otras palabras, el grupo vuela con más más asientos vacíos por todo el mundo, por lo que no es el mejor momento para comprar más capacidad no rentable, se podría pensar.
Los recordatorios de los recurrentes problemas de extralimitación del sector bastaron para provocar una caída de Ryanair (LON:RYA), Norwegian Air Shuttle (OL:NWC) y Wizz Air (LON:WIZZ) de más del 2% cada una.
La alemana Lufthansa (DE:LHAG) ha ofrecido mejor actuación, perdiendo sólo un 1,9% a pesar de las declaraciones del domingo de la presidenta de los Demócratas Cristianos de Alemania que apoya un nuevo impuesto sobre los vuelos con el fin de reducir las emisiones de carbono. Annegret Kramp-Karrenbauer dijo en una entrevista para la emisora estatal ARD que un gravamen sobre los vuelos podría ser "una forma" de avanzar, junto con la reducción del impuesto sobre el valor añadido del transporte ferroviario, con menor intensidad de carbono. Francia ya introdujo un impuesto relacionado con el carbono sobre los vuelos a principios de este verano, y un acercamiento de la política entre los dos mayores países de la UE podría allanar el camino hacia una iniciativa paneuropea para limitar las emisiones en un sector en el que siguen aumentando rápidamente.
La tercera parte del triple impacto de este lunes afecta a una sola compañía: International Airlines Group (LON:ICAG) cae un 1,8% mientras los pilotos de British Airways comienzan su mayor huelga en más de 40 años, en busca de salarios más altos y mejores condiciones de trabajo. Esa noticia, sin embargo, ya se había visto venir.
Por otra parte, los mercados europeos se mueven de forma dispar; el índice Stoxx 600 de referencia se mantiene prácticamente sin cambios en 387,24. El FTSE MIB se sitúa a la cabeza del avance, subiendo un 0,3% hasta su cota más alta desde finales de julio. El FTSE 100 del Reino baja un 0,1% junto con el CAC 40 francés, mientras que el DAX de Alemania avanzan un 0,2%.