Por Laurence Frost y Gilles Guillaume
PARÍS (Reuters) - Renault (PA:RENA) prevé que los motores diésel desaparezcan de la mayoría de sus coches europeos, dijeron a Reuters fuentes de la compañía, después de que el fabricante de automóviles francés evaluase los costes de cumplir con unos estándares más estrictos en materia de emisiones tras el escándalo de Volkswagen (DE:VOWG_p).
Esta sobria evaluación se presentó en una reunión interna antes de las vacaciones de verano y muestra que -un año después de que VW admitiese que trucó mediante software las pruebas de emisiones en Estados Unidos-, las repercusiones del escándalo están obligando a los principales fabricantes europeos de automóviles a revisar los planes estratégicos que darán forma a su futuro en los próximos años.
Renault y su rival doméstico Peugeot (PA:PEUP), ambos con grandes inversiones en tecnología diésel, defendieron en un principio su viabilidad tras estallar la crisis de VW.
Sin embargo, en la reunión de julio, el director general de competitividad de Renault, Thierry Bollore, dijo que las perspectivas para invertir en diésel se habían empañado significativamente, según dos personas que estuvieron presentes.
"(Bollore) Dijo que ahora la pregunta es si el diésel sobrevivirá y que no habría expresado estas dudas a principios de este mismo año", dijo una de las personas.
"Unos estándares y métodos de pruebas más estrictos aumentarán los costes tecnológicos hasta el punto en el que el diésel se vea expulsado del mercado", dijo en el diesel es forzado a salir del mercado", dijo la fuente resumiendo los comentarios de Bollore.
Un portavoz de Renault no quiso hacer comentarios.
Los motores diésel, más caros pero más eficientes que los de gasolina, ya habían desaparecido de los vehículos más pequeños del segmento A como el Renault Twingo mucho antes del denominado "dieselgate" de VW porque el coste extra no compensaba el ahorro en combustible.
De aquí a 2020, Renault prevé ahora que el endurecimiento de las normas de emisiones Euro 6 expulsarán al diésel de los coches del siguiente segmento en tamaño, el de 'categoría B, entre ellos el Renault Clio, así como de algunos modelos del segmento C como el Megane, dijeron las fuentes.
Los modelos de estas tres primeras categorías representaron la mayoría de los 1,6 millones de vehículos entregados el año pasado, y más del 60 por ciento montaban motorizaciones diésel.
Modelos en esos primeros tres categorías de tamaño representaron la mayor parte de los 1,6 millones de entregas en Europa del grupo el año pasado, y más del 60 por ciento eran motores diesel.
"Todo el mundo está retrocediendo en el diesel porque después de 2017-18 se vuelve más y más caro", dijo Pavan Potluri, un analista de la cadena cinemática de la consultora IHS Automotive.
"Todo el mundo está dando la espalda al diésel porque después de 2017-2018 será cada vez más caro", dijo Pavan Potluri, analista de la consultora IHS Automotive.