Madrid, 5 abr (.).- Renfe empezará a recibir los trenes s-106, conocidos como Avril, del fabricante Talgo (BME:TLGO) para dar servicio a los enlaces entre Madrid, Galicia y Asturias a finales de la próxima semana o como fecha tope el 22 de abril, y comenzarán a operar el 21 de mayo.
Fuentes del Ministerio de Transportes han confirmado a EFE el calendario previsto para la entrega de los convoyes, prevista inicialmente para enero de 2021, por cuyos retrasos Renfe reclama a Talgo una indemnización de 166 millones de euros (50 de ellos por lucro cesante) y 80.000 euros diarios más desde el pasado 1 de abril.
Las entregas de los 30 trenes serán progresivas, según las fuentes. El día 18 Renfe comenzará a vender los billetes para estos servicios y la fecha de inicio de los viajes será el 21 de mayo como tope.
Una vez fabricados, Talgo debe probar en las vías los trenes, que han de completar 25.000 kilómetros consecutivos sin ninguna incidencia, proceso que se está rematando de forma satisfactoria, según fuentes del sector.
Cuando los reciba, Renfe hace una recepción provisional tren a tren porque el hecho de haber superado las pruebas no significa que los vayan a poner en circulación de forma inmediata.
Los nuevos trenes tienen 507 plazas por vehículo para el AVE y 581 para el servicio de bajo coste a través de AVLO, con lo que duplican la capacidad de los Alvia actuales y reducen el tiempo de viajes.
Aunque la fecha que avanzó el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, era el próximo 8 de abril, las entregas no comenzarán hasta la semana que viene, más bien a finales, con tope el día 22 de este mes.
El pasado 6 de febrero Renfe envió a Talgo una carta en la que reclamaba los 166,6 millones de euros y le advertía de la sanción de 80.000 euros diarios a partir del 1 de abril si los trenes siguieran sin entregarse.
La carta se envió un día antes de que se anunciara formalmente la opa de la empresa húngara Magyar Vagon sobre el 100 % Talgo.
Renfe consideraba en la misiva que la documentación aportada por Talgo no justificaba que los retrasos fueran imputables a factores exógenos y le recordaba que se trataba de "un flagrante incumplimiento de sus obligaciones contractuales", que están causando a la operadora y a los usuarios importantes perjuicios.
Talgo había alegado para justificar la demora causas de fuerza mayor, entre ellas caídas en la producción e interferencias en la cadena de suministro generadas por la covid-19 y otros eventos geopolíticos.
En 2016, Renfe adjudicó a Talgo por 1.281 millones la construcción de 30 trenes de alta velocidad, 15 de ellos de ancho variable -que pueden circular por vía convencional y estándar-.
Debían haber sido entregados inicialmente a partir de enero de 2021 para entrar en servicio aquel verano en los enlaces entre Madrid, Galicia y Asturias.