MADRID (Reuters) - Reyal Urbis, que llevaba más de tres años intentando salir de una situación concursal, se dirige a la liquidación después de que sus acreedores rechazaran una propuesta de convenio que contemplaba fuertes quitas para su abultada deuda, dijo el miércoles una fuente conocedora del resultado de la votación.
"No se ha llegado a la mayoría necesaria para aprobar la propuesta de convenio por parte de los acreedores", dijo la fuente.
La inmobiliaria había propuesto a sus acreedores - entre los cuales están la Sareb, Hacienda o Santander (MC:SAN) - la dación en pago de los activos de la compañía excepto "unos activos mínimos" o bien una quita de entre el 88 y el 93 por ciento de la deuda para cancelar un préstamo sindicado de 2.276 millones de euros.
Los acreedores tenían hasta el 31 de mayo para adherirse a esa propuesta, y, según la fuente, su rechazo supone en la práctica el primer paso hacia la liquidación de la empresa, a falta de que el juez dicte el plan de liquidación en función de los activos y pasivos de la sociedad tras certificar el rechazo a la propuesta.
El grupo inmobiliario, cuyas acciones están suspendidas desde que presentara concurso de acreedores en febrero de 2013, cerró el primer trimestre del año con un endeudamiento financiero neto de 3.572 millones de euros - de ellos 2.893 millones en préstamos sindicados, y con un total de activos de 1.224 millones.
Su liquidación sería una de las mayores en el sector inmobiliario en España, aunque no supera la de Martinsa Fadesa en 2015, que se liquidó con un pasivo de unos 7.000 millones de euros.
La empresa, que quedó muy afectada por el parón inmobiliario en un momento de elevado endeudamiento tras la compra de Urbis, dijo al cierre del primer trimestre que confiaba en "una resolución favorable" a su propuesta de convenio.
No fue posible obtener un comentario inmediato de Reyal Urbis.