Madrid, 28 feb (.).- La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, considera que "hay espacio" para tomar nuevas medidas en el contexto europeo, pero también en el doméstico, para paliar el impacto de la guerra de Ucrania en el suministro y los precios de la energía.
Ribera, que ha intervenido este lunes por videoconferencia desde Bruselas en la inauguración del encuentro "Expansión Sector Energía", cree que hay espacio para medidas encaminadas a dar cobertura a los consumidores vulnerables, para que los precios se aproximen a los costes y para eliminar el desajuste que se viene produciendo en los costes relativos a cada tecnología de producción eléctrica.
Ha dicho que el gran problema al que "nos enfrentamos" en estos momentos es la enorme dependencia de Europa de proveedores de materias primas básicas para la seguridad energética.
En el caso de España, ha recordado que tiene una mejor posición que otros estados miembros, más dependientes del gas ruso.
En su opinión, hay espacio para tomar decisiones en el ámbito europeo y también en el doméstico, apostando por utilizar todos los recursos de los que ahora se dispone para invertir más en autoconsumo, soluciones energéticas locales y acelerar la transición energética.
Respecto al gas natural, ha dicho que España cuenta con un tercio de la capacidad de regasificación en Europa, aunque hay un "cuello de botella", que es la falta de conexión más allá de los Pirineos con el sistema europeo central de gas.
No obstante, ha señalado que esa interconexión llevaría tiempo y no facilitaría el acceso en pocos meses al gas que llegaría desde España, al tiempo que ha indicado que estas infraestructuras deben plantearse teniendo en cuenta que puedan ser útiles al menos diez años o más.
Ribera ha indicado que, a pesar de ello, la gran capacidad que ofrecen las terminales de regasificación españolas permiten aportar garantía y proximidad a los consumidores del resto de Europa, y es una de las líneas que está impulsando la CE, junto a la coordinación de almacenamientos de gas y establecer para el gas reservas estratégicas obligatorias como se hace con el petróleo.
En cualquier caso, ha dicho que hay que evitar que el ajuste se produzca por una reducción de la demanda por la caída de la producción industrial, sino que se haga por un consumo más inteligente, impulsando la eficiencia.
Preguntada si hay un consenso europeo sobre el sistema de fijación de precios de la electricidad en Europa, ha señalado que en lo que hay consenso es "en la gravedad de la situación que atravesamos" y en la necesidad de encontrar respuestas adecuadas.
Ha añadido que eso plantea que se adopten medidas de carácter temporal, pues las estructurales requieren más tiempo, aunque ha dicho que en el caso de estas últimas se puede abrir el debate, pues para Ribera se tienen que producir las dos cosas al mismo tiempo: excepciones en algunas reglas del mercado mayorista y la apertura de un debate sobre la orientación de su diseño de carácter estructural.
Ribera ha señalado que lo que está ocurriendo en Europa es excepcional y ello hace difícil articular una respuesta común, aunque ha añadido que sí está muy claro el "máximo compromiso político" para encontrar soluciones que respalden todos los países.
Además, ha dicho que si se quiere ser eficaz, las medidas deben ser efectivas cuanto antes, y no esperar dos o tres años.
En cuanto al Consejo de Ministros de Energía de esta tarde en Bruselas, ha indicado que uno de los puntos es la solidaridad con Ucrania, que se está viendo afectada en la disponibilidad de suministros energéticos.
Asimismo, ha señalado que se tratarán medidas coordinadas en el ámbito europeo para diversificar las fuentes de suministros energético, además de la forma de fortalecer y seguir construyendo la transición energética.
También ha indicado que se abordará cómo mitigar al máximo el impacto en Europa de las limitaciones de importaciones de Rusia que introducen las sanciones que se han impuesto a ese país por invadir Ucrania, la concertación con socios de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), la diversificación de proveedores, la seguridad del suministro y trabajar para que la crisis de Ucrania impacte lo menos posible en los consumidores.