Mateo Sancho Cardiel
Nueva York, 3 sep (EFE).- Una vez más, el tira y afloja de la crisis de Ucrania y las dudas que se ciernen sobre las afirmaciones de Rusia volvieron a despistar a los inversores de Wall Street, que hoy vivieron una jornada mixta con el Dow Jones subiendo levemente, el S&P 500 con descensos mínimos y el Nasdaq con caídas notables.
La complejidad de la política internacional en los últimos meses sigue bloqueando la capacidad de reacción de los inversores, que hoy empezaron animados por una posible paz entre Rusia y Ucrania anunciada por el presidente ruso, Vladímir Putin, que luego fue perdiendo verosimilitud.
De hecho, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, acusó a Rusia de agresión en Ucrania y siguió apoyando las sanciones económicas al país, y enviará 200 soldados a la zona de conflicto para maniobras militares.
Así las cosas, en el parqué neoyorquino tomaron la decisión de centrarse en los datos económicos, aunque estos tampoco facilitaron que los índices tomaran un rumbo fijo.
Hubo una buena noticia, pues agosto fue uno de los mejores meses de ventas de automóviles de la última década en Estados Unidos, pero no sorprendió a nadie, pues era lo esperado.
Y la última esperanza para dar color rojo o verde a la jornada, estaba en el "libro beige" de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed), que no desveló ningún detalle sobre el aumento de los tipos de interés y se limitó a hablar de un crecimiento económico "entre modesto y moderado".
Así las cosas, tanto el Dow Jones como el selectivo S&P 500 cerraron rebasando sus barreras psicológicas. El primero se colocó 78 puntos por encima de sus 17.000 puntos mientras que el segundo ajustó su descenso para quedarse solo 72 centésimas por encima de sus recién conseguidos 2.000 enteros.
Nasdaq, en cambio, sí pudo sentir que hoy tenía un destino negativo y bajó un 0,56 %, empujado sobre todo por la caída de Apple, superior al 4 %, debida al lanzamiento de su rival Samsung de dos nuevos teléfonos móviles.