Por Sarah White
MADRID (Reuters) - El paro registrado en España descendió en mayo por tercer mes consecutivo apoyado en una favorable estacionalidad y en llegadas récord de turistas que contribuyeron a situar el número de parados por primera vez en seis años por debajo de los cuatro millones.
La cifra podría ayudar a la popularidad del presidente en funciones Mariano Rajoy a tres semanas de que se repitan las elecciones generales en el país.
"Son datos positivos que indican que la economía española continúa con dinamismo, un crecimiento económico por encima del 3 por ciento que se traduce en una generación de empleo muy intensa", dijo el ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos.
En un mes tradicionalmente bueno para el empleo desde el punto de vista de la estacionalidad al prepararse las contrataciones estivales en el sector servicios, el número de parados bajó en 119.768 personas, un descenso récord para mayo, hasta los 3.891.403. Uno de cada tres puestos creados en el mes tiene que ver con hoteles o restaurantes.
Se trata del último dato sobre empleo que se publicará antes de las reñidas elecciones del 26 de junio para las que los sondeos apuntan a una nueva victoria insuficiente del PP y un auge del partido antiausteridad ahora en coalición en Unidos Podemos.
"Si la campaña es importante, estas cifras también lo son, especialmente para el PP", explicó el analista de Teneo Intelligence, Antonio Barroso.
NO PARA TODOS
Aunque desde el fin de la recesión hace casi tres años los indicadores macroeconómicos muestran una progresiva mejora que parece no haberse frenado con la falta de gobierno desde diciembre, todavía hay muchas personas que no encuentran trabajo y entre algunos votantes el descontento no hace más que crecer.
Como viene ocurriendo en meses previos, los críticos siguen criticando la "precariedad" del empleo supuestamente impulsada por las últimas reformas laborales que ahora varios partidos políticos prometen modificar si gobiernan.
"Los datos revelan que se continúa ahondando en la senda de la precariedad y temporalidad de los meses anteriores", dijo Mari Carmen Barrera, responsable de política social de UGT, un sindicato que critica la estacionalidad de un mercado laboral muy dependiente del turismo.
El responsable de Economía coincidió al afirmar que el empleo de calidad ha de ser indefinido. "El problema de la temporalidad en España es un problema muy importante, tenemos una temporalidad en torno al 25 por ciento de los asalariados, por encima de la media comunitaria (....) el peso del contrato temporal es excesivo y se tiene que reducir", dijo Guindos.
Aunque el empleo indefinido creció un 17 por ciento, solo supone un ocho por ciento del total de los contratos creados.
Pese a reconocer que el camino por recorrer es todavía largo, Rajoy y otros miembros del partido en el gobierno aprovecharon la cifra para asegurar que el empleo es su primera prioridad y que hay que seguir trabajando para reducir el mayor desequilibrio social y de la economía nacional.