Madrid, 26 feb (EFE).- El presidente de Sacyr, Manuel Manrique, ha anunciado hoy que la compañía prevé un incremento de dos dígitos para 2015 en el beneficio después de impuestos, en la cifra de facturación y especialmente en el resultado bruto de explotación (ebitda), en el que espera un alza del entorno del 20 %.
En una conferencia con analistas para presentar los resultados de 2014, Manrique ha detallado que el beneficio después de impuestos podría llegar incluso a multiplicarse durante este año, en el que se espera que el ebitda se incrementar más que la cifra de negocios.
A cierre de 2014, Sacyr volvió a beneficios tras ganar 33 millones frente a las pérdidas de 499 millones contabilizadas en 2013, el ebitda se situó en 382 millones de euros, el 30 %, y la cifra de facturación creció un 8,5 % hasta 2.901 millones.
La compañía está trabajando en un nuevo plan estratégico a largo plazo que refuerce las actuaciones de la compañía, que ha llevado a cabo una reorganización interna para reforzar sus órganos de decisión, el control de los riesgos y el soporte de los negocios.
Tras volver a beneficios, la compañía enfila la senda para una posible recuperación del dividendo, aunque por el momento no hay ninguna decisión adoptada.
Entre los objetivos de la compañía se encuentra aplicar excesivos controles de riesgos y costes, lo que le ha llevado a renunciar a muchos contratos en los que los márgenes estaban poco claros, ha reconocido.
La reducción de deuda es una "obsesión" para la compañía, que se siente cómoda por permanecer tres años más en Repsol (MADRID:REP), donde actualmente cuenta con una participación del 8,89 % y una deuda asociada a la misma que representa el 30 % del total. El resto de la deuda, hasta 3.000 millones, está asociada a proyectos (Testa 1.700 millones) y a concesiones.
El objetivo para este año es disminuir, e incluso cancelar totalmente la deuda corporativa.
Sacyr se anotó 156 millones tras los resultados de Repsol y percibió 240 millones en concepto de dividendos que fueron empleados en amortizar deuda del préstamo sindicado por 2.276 millones que la compañía refinanció recientemente por tres años.
La compañía ha ajustado la participación en la petrolera a 19,8 euros por acción.
Con respecto a la venta de su participación del 15 % en la compañía de concesiones Itínere, Manrique no ha avanzado calendario pero ha subrayado que la recuperación de los tráficos se ha incrementado, lo que facilitará la operación.