Sao Paulo, 25 abr (.).- El presidente del banco Santander (BME:SAN) Brasil, Mario Leão, afirmó este martes que el mercado de crédito en el país suramericano todavía no ha comenzado a recuperarse y solo prevé una mejoría clara a partir de 2024.
"El mercado aún no comenzó a mejorar (...) creo que a lo largo de este año no va a cambiar el apetito", dijo Leão en una rueda de prensa para comentar los resultados financieros trimestrales del banco, que supusieron una merma "importante" en sus beneficios respecto al año pasado.
No obstante, Leão prevé que los beneficios del banco continuarán recuperándose paulatinamente "trimestre a trimestre", para retomar el crecimiento "más fuerte" a partir del primer trimestre de 2024, con un escenario económico "más favorable".
En el primer trimestre de 2023, el Santander Brasil ganó 2.140 millones de reales (384 millones de euros al cambio actual), un 46,6 % menos que en el mismo período del año pasado, según cifras divulgadas por la filial brasileña y que difieren de las presentadas por la matriz.
Según cifras divulgadas en España, que incluyen datos de otras empresas brasileñas del grupo Santander, el beneficio atribuido fue de 469 millones de euros, un 25,2 % menos que en el primer trimestre de 2022.
Leão aseguró que los resultados del primer trimestre no suponen "ninguna sorpresa" y son resultado de las decisiones tomadas por el banco desde finales de 2021 para restringir la expansión de su cartera de crédito.
El crédito se ha resentido en Brasil principalmente por los tipos de interés, que se mantienen en el 13,75 % desde mediados del año pasado, en un intento del Banco Central de controlar la inflación.
Los resultados del primer trimestre también se han visto afectados por la decisión del banco de reforzar la cuenta de provisiones con 4.236 millones de reales (unos 761 millones de euros).
Ese importe corresponde a una reserva que el banco había destinado para cubrir un posible pago de impuestos, que depende de una decisión del Tribunal Supremo.
La evolución del proceso judicial llevó al banco a considerar que no va a tener que hacer ese desembolso, pero aun así la dirección optó por mantener ese importe en la cuenta de provisiones, en lugar de inflar los beneficios del primer trimestre.
El responsable de Santander Brasil explicó que esa decisión responde a una estrategia "prudente", con la que se pretende "crear un colchón" y prepararse para posibles riesgos futuros.
De forma paralela, Leão explicó que el banco mantendrá su estrategia de mejorar la calidad de su cartera de crédito y centrarse en los clientes de alta renta.
"Prefiero crecer menos, pero con más calidad", aseveró el directivo del banco, que ya tiene 61,6 millones de clientes en el país.
El Santander ganó 1,9 millones de clientes netos en el último año, con un crecimiento del 12 %, y el segmento de alta renta llegó a 834.000 clientes, con un aumento del 36 %.
Esa estrategia "selectiva", según Leão, permitió mantener prácticamente estables los índices de morosidad, que a 90 días se encuentran en el 3,2 %, llegando al 4,5 % en el segmento de persona física.