Madrid, 30 oct (.).- La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) redujo sus ingresos casi un 50 % en el primer semestre del año hasta los 540,6 millones de euros, a consecuencia del impacto de la pandemia de coronavirus en su negocio.
Según el balance presentado a cierre de junio, el resultado bruto de explotación (ebitda) registró un importe negativo de 97 millones, que se redujo en un 31 % con respecto a los números rojos de un año antes.
Sareb, que publicará el resultado neto después de impuestos a cierre del ejercicio, contabilizó un resultado negativo antes de impuestos de 399 millones hasta junio, reduciendo esta perdida en un 21 % con respecto al primer semestre de 2019.
No obstante, prevé que los resultados anuales se sitúen en línea con lo esperado gracias a la evolución del margen neto.
EL IMPACTO DE LA PANDEMIA EN EL NEGOCIO
En el semestre, el importe de las ventas de inmuebles de Sareb retrocedió un 54 % hasta los 223,8 millones por la paralización de la actividad entre marzo y mayo a consecuencia de la covid-19.
De hecho, entre enero y junio Sareb vendió 3.533 inmuebles, un 61 % menos, y de ellos 3.122 correspondían a inmuebles propios, lo que supone un descenso del 52 %. El mayor número de operaciones se registró en la Comunidad Valenciana, Galicia, Cataluña y Andalucía.
Ya en el tercer trimestre, las ventas de viviendas crecieron un 10,4 % hasta las 1.260 unidades y el precio se mantuvo estable en 114 millones.
Del total de ingresos del semestre, el 52 % provenía del negocio inmobiliario y el resto de la gestión de los préstamos.
Por su parte, las ventas de suelo contabilizaron hasta junio 147 unidades, un 71,9 % menos, y el importe obtenido se redujo en un 66 % hasta los 20,1 millones. Además, vendió 158 activos terciarios, lo que supone un retroceso del 41,7 %, por un importe un 69 % inferior con 15,7 millones.
Con todo ello, en los seis primeros meses del año Sareb redujo su cartera de activos un 4,1 % hasta los 32.246 millones de euros.
A cierre del primer semestre, la cartera en alquiler de Sareb era de 11.889 inmuebles, siendo más de un 87 % inmuebles residenciales.
Por otro lado, Sareb redujo sus gastos totales -excluidos los financieros- un 25 %, hasta los 261 millones, por los menores asociados a la comercialización de los activos y la implantación de las primeras medidas del Plan de Eficiencia puesto en marcha este año con el que pretende lograr ahorros de más de 45 millones en 2020 y más de 70 millones anualizados.
Según ha indicado Sareb, desde el inicio de la pandemia ha adoptado una estrategia prudente de ventas, tratando de evitar incurrir en descuentos que pudieran impactar en el valor de la cartera y poniendo el foco comercial en los activos menos afectados por la situación como la venta de residencial a particulares.
Durante la pandemia ha concedido moratorias en el pago del alquiler en 191 viviendas y 43 inmuebles terciarios e incorporó en su balance de 7.452 inmuebles que figuraban como garantía de préstamos impagados cuyo valor alcanzó los 585,8 millones, un 31 % menos.
NO PREVÉ AMORTIZAR DEUDA ESTE AÑO
Teniendo en cuenta las mejores estimaciones de las que dispone la compañía, durante este ejercicio Sareb no generará caja suficiente como para poder realizar nuevas amortizaciones de la deuda, tal y como venía haciendo desde el inicio de su actividad hace siete años y medio.
Durante dicho periodo ha repagado 15.683 millones de euros -el 31 % del total- de la deuda que emitió para adquirir en 2012 activos problemáticos de las nueve entidades financieras que recibieron ayudas públicas y ha ingresado más de 27.000 millones y abonado casi 2.785 millones en intereses a las entidades que le traspasaron sus activos.
A 30 de junio los fondos propios de la compañía ascendía a 169 millones negativos, frente a 230 millones de euros positivos a cierre de 2019.
REDUCCIÓN DE SUELDO DE CONSEJEROS EXTERNOS
Además de los cambios en el organigrama, la junta ha aprobado esta semana la propuesta de reducción del salario de los consejeros externos en un 15 % ante la crisis sanitaria y económica originada por la pandemia.