Múnich (Alemania), 7 set (.).- El presidente de Seat, Wayne Griffiths, ha dado por hecho este martes que la escasez de semiconductores "va a tener gran impacto" en los resultados de la compañía por la reducción de la producción y la imposibilidad de recuperar las unidades perdidas en lo que queda de año.
Ante la crisis de estos chips, que afecta a la industria mundial del automóvil, Griffiths ha asegurado que no queda más que aplicar la flexibilidad laboral en la fábrica de Martorell (Barcelona) y "hacerlo lo mejor que podamos".
En declaraciones a los periodistas durante la presentación en Múnich del prototipo urbano eléctrico de Cupra, el máximo ejecutivo de Seat ha lamentado la situación que está viviendo el sector por la falta de estos componentes y ha destacado que Seat está priorizando la fabricación de coches híbridos y eléctricos para poder cumplir los objetivos de emisiones de la Comisión Europea.
"El impacto será mayor del que preveíamos antes del verano. Éramos más optimistas antes del verano y queríamos recuperar producción en el segundo semestre, pero en julio y agosto nos ha afectado bastante. Los problemas seguirán en el segundo semestre", ha señalado.
La filial española del grupo Volkswagen (DE:VOWG_p) no ha cuantificado aún la pérdida de producción ocasionada por la falta de semiconductores, que se ha frenado en parte por los turnos extraordinarios que se trabajaron en Martorell en agosto, un mes en que la fábrica siempre cierra.
Así, Seat consiguió producir 12.000 coches durante el mes pasado.
La falta de semiconductores ha coincidido en el tiempo con un fuerte demanda de los modelos de Seat, "la más alta de la historia", ha señalado Griffiths, que ha lamentado que los tiempos de entrega de los vehículos a los clientes son "demasiado altos".
La escasez de estos componentes ha llevado a la fábrica de Martorell, la principal planta de automóviles de España, a cerrar ayer y hoy, así como el próximo viernes.