Seúl, 26 nov (EFE).- La Bolsa de Seúl cerró hoy con un moderado ascenso atribuido por analistas locales a la confianza de los inversores extranjeros e institucionales, a pesar de los temores por la subida de la moneda local, el won.
El índice referencial Kospi subió 6,66 puntos, el 0,33 por ciento, hasta 2.022,64 unidades en una sesión en la que se movieron 3.190 millones de dólares, mientras el tecnológico Kosdaq escaló 2,78 puntos, el 0,55 por ciento, hasta los 510,54 enteros.
El Kospi comenzó la sesión con una fuerte bajada, aunque finalmente acabó en terreno positivo gracias a las compras de títulos de los inversores extranjeros e institucionales, informaron analistas surcoreanos.
Los expertos destacaron que los inversores mostraron cautela a la hora de adquirir nuevas acciones del Kospi debido a la continua tendencia al alza del won, en comparación con el dólar.
La moneda local ganó 2 unidades frente al dólar, que se intercambiaba en 1.059,9 wones al cierre de la sesión.
Un won fuerte perjudica a las exportaciones de Corea del Sur, que son el principal puntal de la cuarta economía de Asia.
En el sector de la tecnología el gigante Samsung Electronics, valor de referencia del mercado bursátil local, cerró la sesión con una subida del 0,96 por ciento.
El mayor operador de telefonía móvil de Corea del Sur, SK Telecom, vio crecer sus títulos un 2,34 por ciento.
Por el contrario, la mayoría de las empresas textiles y siderúrgicas finalizaron con pérdidas, como la principal firma de ropa del país, LG Fashion, que cayó un 3,72 por ciento, y el gigante del acero POSCO, que se dejó un 0,46 por ciento. EFE