Buenos Aires, 29 ene (EFE).- Los sindicatos argentinos rechazaron hoy el aumento del 20 por ciento del ingreso mínimo a partir del cual se aplica el denominado "impuesto a las ganancias" que pesa sobre los salarios de miles de trabajadores y amenazaron con movilizaciones.
"Sabemos que no alcanza. El 25 por ciento hubiese sido el número ideal, pero es un paso positivo", dijo en rueda de prensa el titular de la Central de Trabajadores de Argentina (CTA) oficialista, Hugo Yasky.
Los gremios enfrentados al Gobierno argentino fueron más críticos y calificaron de "burla" el aumento del 20 por ciento del mínimo no imponible anunciado ayer por la presidenta, Cristina Fernández.
"Seguramente iniciaremos un plan de lucha, basta de marchas...vamos directamente a los paros", declaró a Radio Mitre el líder de la Confederación General del Trabajo Azul y Blanca, Luis Barrionuevo.
"Lo que dan es una burla", denunció Barrionuevo, que adelantó que el próximo 6 de febrero se reunirá con Hugo Moyano, exaliado del kirchnerismo y actual líder de la CGT opositora, y con Pablo Micheli, titular de la CTA opositora.
"Esto no es beneficio, es perjuicio", aseguró hoy a los medios Moyano y agregó que los gremios van a solicitar aumentos de salario "por encima del 25 por ciento" en la negociación de los convenios colectivos para 2013.
Fernández anunció este lunes el aumento del mínimo salarial a partir del cual se aplica el "impuesto a las ganancias" y explicó que la medida implicará para el Fisco un "sacrificio fiscal importante" de 8.000 millones de pesos (1.610 millones de dólares).
A partir del 1 de marzo, sólo tributarán el impuesto los trabajadores solteros con salarios mensuales a partir de 8.360 pesos (1.682 dólares) y los casados con hijos que cobren a partir de 11.563 pesos (2.326,5 dólares).
La modificación del mínimo no imponible era desde hace meses eje de reclamos por parte de los sindicatos argentinos, tanto opositores como oficialistas. EFE