San José, 3 abr (EFE).- Los sindicatos costarricenses exigieron hoy el retiro de la reforma fiscal que se tramita en el Congreso, debido a la falta de "moral" en el Gobierno, un día después de la renuncia del ministro de Hacienda a causa de una polémica por evasión de impuestos.
La Asociación Nacional de Empleados Públicos (ANEP), la principal central sindical del país, indicó en un comunicado que el escándalo tributario en el que está envuelta la clase política "pulveriza la credibilidad del Gobierno para seguir abogando a fin de que en el Parlamento le aprueben su plan fiscal".
"Esta conmoción ética deja una gran deuda moral de parte de la señora presidenta (Laura) Chinchilla con el pueblo (...), deuda moral que debe ser saldada renunciando a la aprobación del plan fiscal, sacándolo de la corriente legislativa", señaló la ANEP.
Una investigación del diario local La Nación, publicada el pasado 26 de marzo, reveló que once ministros, entre ellos el de Hacienda, Fernando Herrero, tenían sin actualizar el valor de sus propiedades desde hace años, por lo que pagaban por ellas menos impuestos de lo correspondiente.
Herrero renunció ayer, según dijo en su carta de dimisión, para "proteger" a Chinchilla y al Gobierno y no generar "distracciones" en la tramitación de la reforma tributaria.
La ANEP solicitó al Gobierno que instale una "gran comisión nacional político-multisectorial" para buscar acciones de combate a la evasión y la eliminación de los sistemas de exenciones y de exoneraciones "abusivos", con lo cual, según el sindicato, no habría necesidad de más impuestos para paliar el déficit.
La ANEP anunció que es posible que se realicen manifestaciones contra la reforma tributaria en las próximas semanas.
La Nación publicó hoy otra investigación en la que señala que una empresa fundada en 1998 por Herrero y su esposa, Flor Isabel Rodríguez, "omitió al menos 50 millones de colones (unos 100.000 dólares al cambio actual) en el reporte de ingresos para el período fiscal 2009-2010".
La empresa brindó asesorías al Gobierno el año pasado, agregó el rotativo.
Herrero respondió escuetamente algunas preguntas en las que reconoció haber sido socio fundador y presidente de la junta directiva de la firma, pero aseguró que traspasó las acciones a su esposa en 2006.
La esposa del exministro trabajaba como asesora de la Casa Presidencial y también presentó su renuncia ayer.
La reforma tributaria que el Gobierno impulsa ya fue aprobada por el Congreso en el primero de dos debates requeridos.
Este proyecto busca una recaudación adicional de unos 600 millones de dólares anuales, equivalentes al 1,5 % del producto interno bruto (PIB) del país, con el fin de paliar el déficit estimado en un 5 % del PIB para este año.
En la reforma se sustituye el impuesto de ventas del 13 % por uno al valor agregado del 14 %, que amplía los productos y servicios por los que hay que tributar, y además incluye un nuevo gravamen del 2 % para los servicios privados de salud y educación, así como un nuevo impuesto de renta global y modificaciones al de renta. EFE