Barcelona, 6 abr (.).- Los principales sindicatos de CaixaBank (MC:CABK) reclaman que el ajuste de plantilla fruto de la fusión con Bankia (MC:BKIA) sea voluntario y no incluya medidas traumáticas ni traslados forzosos.
Este es el punto de partida con el que los sindicatos afrontan la negociación del recorte de plantilla asociado a la fusión con Bankia, que arrancará el 13 de abril.
Fuentes sindicales consultadas por Efe evitan poner cifras a la dimensión que puede tener el ERE, pero dan por supuesto que será de gran tamaño dada la plantilla que suma la nueva CaixaBank, que es de un total de 46.762 personas, incluyendo el banco y sus filiales.
CaixaBank ha comunicado este lunes a los sindicatos que el próximo 13 de abril arrancarán los contactos para negociar el ajuste de plantilla fruto de la fusión con Bankia.
En concreto, la dirección del banco ha trasladado a la representación legal de la plantilla la intención de "iniciar el procedimiento de despido colectivo previsto en el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores con afectación a todos los centros de trabajo de la entidad, así como la modificación sustancial de las condiciones de trabajo, de acuerdo con el artículo 41 del Estatuto de los Trabajadores", detalla en un comunicado.
Los sindicatos recuerdan que el convenio de CaixaBank establece un período de consultas previas antes de la presentación del ERE, por lo que estiman que a partir del 13 de abril se iniciará un período de unas dos semanas antes de desembocar luego en el período de negociación formal del ERE.
Una de las preocupaciones de los sindicatos es que la plantilla de mayor edad no está repartida de forma homogénea por toda España, de manera que será complicado hacer cuadrar los deseos de la dirección con el mapa territorial que presenta el banco.
Otro temor también es si, tras la experiencia de la pandemia, CaixaBank querrá hacer un ajuste de personal en oficinas más contundente de lo previsto inicialmente, dado que la covid-19 ha impulsado aún más la digitalización del banco.