Tokio, 9 mar (.).- La Bolsa de Tokio subió hoy animada por el anuncio de una próxima reunión entre el presidente de EE.UU., Donald Trump y el líder norcoreano, Kim Jong-un, y los indicios de que algunos países podrían quedar exentos de los nuevos aranceles de Washington.
El índice Nikkei cerró con un avance de 101,13 puntos, un 0,47 %, hasta situarse en 21.469,20 puntos, mientras que el segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, subió 5,53 puntos, un 0,32 %, hasta las 1.715,48 unidades.
El parqué tokiota abrió la jornada al alza animada por los avances en el deshielo de relaciones entre Corea del Norte y Estados Unidos y el anuncio de la que podría ser la primera reunión entre los líderes de ambos países, en la que podrían abordar la desnuclearización de la península coreana.
También influyó positivamente en el ánimo de los inversores de Tokio la disminución de la preocupación en torno al proteccionismo comercial de Washington, ante los indicios de que algunos países podrían quedar exentos de la imposición de aranceles a las importaciones de acero (25 %) y aluminio (10 %).
La decisión arancelaria de Estados Unidos, que fue calificada hoy como "lamentable" por el ministro nipón de Asuntos Exteriores, Taro Kono, ha despertado temores a una "guerra comercial" global, pero el anuncio de la Casa Blanca de una posible exención rebajó el temor.
Entre las compañías que cosecharon ganancias estuvieron el fabricante automovilístico Subaru (T:9632), que subió un 0,5 %, y las tecnológicas Hitachi (T:6501) y Panasonic (T:6752), que lo hizo en un 1,6 % y 1, 5 %, aupadas por la debilidad de yen frente al dólar estadounidense.
Las fabricantes de equipamiento de defensa fueron las grandes perjudicadas de la jornada ante el descenso de la tensión geopolítica en la península coreana. Ishikawa Seisakusho (T:6208) se dejó un 10,9 % y Howa Machinery perdió un 10,4 %.
En la primera sección, 1.097 valores avanzaron frente a 886 que retrocedieron, mientras que 86 terminaron el día sin cambios.
El volumen de negocio ascendió a 3,558 billones de yenes (27.077 millones de euros), por encima de los 2,501 billones de yenes (19.024 millones de euros) de la víspera.
Tokio inició su semana en rojo y registró su peor nivel en casi cinco meses por el temor de los inversores a las consecuencias del alza arancelaria en Estados Unidos.
El proteccionismo de la primera economía mundial marcó el ánimo de los inversores nipones durante la semana, que consiguió cerrar con ganancias después de que los inversionistas vieran con buenos ojos la decisión de que algunos países quedaran exentos de esos aranceles, con la esperanza de que uno de ellos sea Japón.