Ginebra, 3 may (EFE).- El primer banco helvético, UBS (SIX:UBSN), tuvo en el primer trimestre del año un beneficio neto de 707 millones de francos (642 millones de euros,) un 64 por ciento menos respecto a los 1.980 millones de francos (1.799 millones de euros) obtenidos en el mismo periodo del año anterior.
Según un comunicado de la entidad bancaria, las incertidumbres económicas y geopolíticas, combinadas con la volatilidad de los mercados mundiales provocaron que los clientes no quisieran arriesgarse.
Esto provocó que hubiera volúmenes de transacciones especialmente débiles, añade el texto.
"Teniendo en cuenta los niveles de actividad excepcionalmente débiles de la clientela, hemos gestionado eficazmente nuestros recursos y hemos logrado progresar en los costos", dijo, en el comunicado, el consejero delegado de UBS, Sergio Ermotti.
El grupo registró un beneficio antes de impuestos de 978 millones de francos (888 millones de euros) una caída también del 64 por ciento con respecto a los 2.700 millones hace un año (2.453 millones de euros al cambio de hoy).
No obstante estos resultados, las actividades de gestión de fortuna atrajeron un flujo neto de dinero fresco de 29.000 millones de francos (26.356 millones de euros), la cantidad más elevada desde 2008.
El departamento de gestión de fortuna acumula actualmente 15.500 millones de francos (14.087 millones de euros).
Con respecto a la banca de inversiones, el beneficio trimestral cayó un 67 por ciento hasta 253 millones de francos (230 millones de euros) con respecto al mismo periodo del año anterior.
El banco pretende proponer a los accionistas un dividendo ordinario de 0,60 francos (0,54 euros) por acción y un dividendo especial de 0,25 francos (0,22 euros) por acción con respecto al ejercicio 2015.