Toronto (Canadá), 4 jun (EFE).- La empresa canadiense Cameco, uno de los mayores productores de uranio del mundo, ha decidido retirarse de un proyecto de exploración en Argentina que compartía desde hace dos años con la empresa Calypso Uranium en las provincias de Chubut, Mendoza y Neuquén.
Calypso Uranium, que también tiene sede en Canadá, dijo a través de un comunicado que Cameco le ha comunicado que no ejercerá su derecho a proceder con el tercer año de un acuerdo con su subsidiaria Energía Mineral.
Según el acuerdo, firmado en 2010, Cameco tenía el derecho a un 51 % de Energía Mineral a cambio de una inversión de nueve millones de dólares en tres años.
Calypso Uranium añadió que Cameco comunicó que su decisión no está relacionada con el desempeño de las compañías sino con "un cambio estratégico en las regiones y proyectos en los que Cameco concentrará sus esfuerzos de exploración".
Cameco, que tiene su sede en la provincia canadiense de Saskatchewan, es uno de los mayores productores de uranio del mundo, con minas en Canadá, Estados Unidos, Kazajistán y Australia.
La decisión de Cameco de suspender sus actividades en Argentina se produce después de que otras compañías mineras canadienses hayan mostrado preocupación por la situación del clima inversor del país suramericano tras el conflicto de Buenos Aires con la empresa española Repsol.
Hace una semana la empresa minera canadiense Pan America Silver, dedicada a la extracción de plata, dijo que reduciría sus inversiones en Argentina a la espera de una clarificación de la situación.
Otras empresas mineras canadienses han advertido que las decisiones del Gobierno argentino sobre inversiones extranjeras pueden afectar grandes proyectos de recursos naturales.
Por ejemplo, McEwen Mining informó a sus accionistas a mediados de mayo que "la incertidumbre relacionada a la repatriación de fondos de la mina San José podría obstaculizar la capacidad de financiar internamente sus proyectos".
La semana pasada, el principal periódico canadiense, The Globe and Mail, publicó un editorial crítico con las medidas del Gobierno argentino sobre restricciones comerciales y monetarias, así como la decisión de expropiar YPF a Repsol.
"Expropiar YPF no ayudará a Argentina, un país del G20, a largo plazo, es improbable que haga el sector petrolífero más eficiente y daña aún más la reputación global del país", dijo el rotativo. EFE