Varsovia, 14 sep (EFE).- Unos 100.000 sindicalistas, según estimaciones policiales, procedentes de toda Polonia, participaron hoy en una manifestación en Varsovia en protesta por la política del Gobierno liberal conservador de Donald Tusk.
La marcha confluyó en el centro de la capital polaca, donde el líder del sindicato Solidarnosc, Piotr Duda, llamó a una recogida masiva de firmas para pedir la disolución del Parlamento y el fin anticipado de la presente legislatura.
Las críticas sindicalistas se dirigen principalmente contra la decisión de elevar la edad de jubilación a los 67 años, los planes de flexibilización de la jornada laboral y la extensión de lo que los representantes de los trabajadores califican de contratos basura.
Los manifestantes gritaron proclamas pidiendo la convocatoria de una huelga general, mientras grupos aislados, al margen de la marcha principal, lanzaban bengalas.
La marcha había sido convocada por el mítico sindicato Solidarnosc y otras dos organizaciones de trabajadores, así como por grupos de la oposición, y fue el punto culminante de los cuatro días de movilizaciones y acciones de protesta organizados desde el mundo sindical.
A lo largo de la marcha no se produjeron incidentes destacables, según fuentes policiales, aunque sí importantes retenciones de tráfico en todo el centro de la capital polaca.
En las movilizaciones precedentes se habían producido algunos altercados, como quemas de neumáticos y ensordecedoras de pitadas en los alrededores del Parlamento.
Para los sindicatos polacos, las políticas liberales del Gobierno de Tusk conducen a una mayor precariedad laboral y a la emigración forzosa de miles de jóvenes.
El desempleo en Polonia se sitúa en torno al 13 %, mientras que el Ejecutivo confía en que el año se cierre con un crecimiento en torno al 1,5 %.
Fuentes sindicales cifraban en más 200.000 el número de participantes en las movilizaciones, repartidos en los cuatro días de protestas. EFE
La marcha confluyó en el centro de la capital polaca, donde el líder del sindicato Solidarnosc, Piotr Duda, llamó a una recogida masiva de firmas para pedir la disolución del Parlamento y el fin anticipado de la presente legislatura.
Las críticas sindicalistas se dirigen principalmente contra la decisión de elevar la edad de jubilación a los 67 años, los planes de flexibilización de la jornada laboral y la extensión de lo que los representantes de los trabajadores califican de contratos basura.
Los manifestantes gritaron proclamas pidiendo la convocatoria de una huelga general, mientras grupos aislados, al margen de la marcha principal, lanzaban bengalas.
La marcha había sido convocada por el mítico sindicato Solidarnosc y otras dos organizaciones de trabajadores, así como por grupos de la oposición, y fue el punto culminante de los cuatro días de movilizaciones y acciones de protesta organizados desde el mundo sindical.
A lo largo de la marcha no se produjeron incidentes destacables, según fuentes policiales, aunque sí importantes retenciones de tráfico en todo el centro de la capital polaca.
En las movilizaciones precedentes se habían producido algunos altercados, como quemas de neumáticos y ensordecedoras de pitadas en los alrededores del Parlamento.
Para los sindicatos polacos, las políticas liberales del Gobierno de Tusk conducen a una mayor precariedad laboral y a la emigración forzosa de miles de jóvenes.
El desempleo en Polonia se sitúa en torno al 13 %, mientras que el Ejecutivo confía en que el año se cierre con un crecimiento en torno al 1,5 %.
Fuentes sindicales cifraban en más 200.000 el número de participantes en las movilizaciones, repartidos en los cuatro días de protestas. EFE