Roma, 14 abr (.).- Unos 5.000 manifestantes pidieron hoy en Roma una solución urgente para la parálisis que atraviesa la aerolínea Alitalia, en concurso de acreedores desde mayo de 2017 y cuya crisis financiera ha retrasado el pago de salarios y amenaza con la quiebra.
La marcha ha sido convocada por los sindicatos, que llevan meses protestando ante la situación de dificultad que atraviesa el sector del transporte aéreo, especialmente con la pandemia, y se ha desarrollado frente al Ministerio de Desarrollo Económico, cuyo titular es Giancarlo Giorgetti, de la ultraderechista Liga.
"Todas las empresas italianas, todas las compañías aéreas están quebrando o han quebrado", se lamentó en declaraciones a Efe el secretario nacional del sindicato Filt Cgil, Fabrizio Cuscito, quien añadió que "hay miles de trabajadores que corren el riesgo de perder su trabajo y no tienen ayudas para llegar a final de mes" por la crisis que vive el sector.
En su opinión, "Alitalia en el transporte aéreo está tan atrás en comparación con el resto de países europeos que ni siquiera se puede hablar de las propuestas. Por desgracia estamos en una situación muy diferente a la de Francia", donde "sus compañías aéreas han recibido cerca de 15.000 millones de ayudas, algo que en Italia no ha ocurrido".
El sindicalista prometió que los representantes de los trabajadores seguirán protestando hasta que haya una solución para Alitalia y el resto de empresas del sector.
Alitalia se encuentra en punto muerto desde hace cuatro años, primero porque ningún inversor privado se ha interesado por comprar la totalidad del negocio, sin beneficios desde el 2002, y ahora porque el Gobierno italiano quería nacionalizarla y Bruselas prefiere una solución de mercado, que no pase por inyectar ayudas públicas a una aerolínea que arrastra problemas financieros desde hace décadas.
Desde 2017, el Gobierno italiano ha entregado a Alitalia dos préstamos por valor total de 1.300 millones de euros para garantizar su operatividad, dinero que nunca se ha devuelto y que la Comisión Europea investiga por si fueron ayudas públicas.
Además, Alitalia ha recibido desde el pasado año más de 270 millones de euros en ayudas para empresas afectadas por la pandemia de coronavirus, con la autorización de Bruselas.
El Gobierno italiano dijo el año pasado que quería crear una nueva sociedad, llamada Ita Spa, que recibiría una inyección inicial de 3.000 millones de euros y asumiría los activos sanos de Alitalia, pero la Comisión Europea ha pedido una licitación real, a precios de mercado y abierta a la competencia.
El Ejecutivo ve en esta posibilidad la entrada de empresas extranjeras y la pérdida de control de una compañía que considera estratégica y no termina de aceptar esta hipótesis.
Giorgetti, que se reunió este miércoles con los sindicatos, dijo que hay que reflexionar sobre planes alternativos si los actuales no llegan a buen puerto, en un comunicado publicado en la página oficial de su ministerio.
"Habrá que reconsiderar todo si el asunto Alitalia no tiene una conclusión positiva y el Parlamento tendrá que implicarse", dijo, al tiempo que subrayó que, más allá de encontrar una solución a la aerolínea, es necesaria una reflexión sobre "la política industrial del sector del transporte" que Italia quiere tener.