Montevideo, 15 oct (EFE).- Un conflicto entre la estatal uruguaya de electricidad UTE y la empresa argentina Techint derivó en el envío al seguro de paro de 850 trabajadores y amenaza con generar una huelga del sector de la construcción en Uruguay, señalaron hoy fuentes oficiales y sindicales.
Techint fue contratada por UTE para las obras de interconexión eléctrica de Uruguay con Brasil sobre una distancia de unos 400 kilómetros de tendido de cables, a través de varios departamentos y con un costo de 130 millones de dólares.
El 70 por ciento de la obra está finalizado, pero debido a supuestos errores en mediciones del terreno que la empresa argentina atribuye a UTE se debieron cambiar unas 300 de las 900 torres del tendido eléctrico por otras más elevadas.
Techint estimó en 36 millones de dólares el costo extra de la obra, pero técnicos de UTE aseguran que no puede superar los 12 millones de dólares.
Tras semanas de negociaciones sin llegar a un acuerdo, el pasado fin de semana la empresa argentina decidió paralizar las obras, en las que trabajan unas mil personas, y comenzó a enviar telegramas a unas 850 para comunicarles su envío al seguro de paro.
Los trabajadores "han quedado como rehenes de una situación en la que nada tienen que ver", destacó a Efe Daniel Diverio, dirigente del Sindicato Único de la Construcción y Afines (Sunca).
Por esa razón, el sindicato se declaró en "asamblea permanente" y sus dirigentes tendrán este miércoles una reunión con autoridades de UTE para "buscar una rápida solución".
"Está claro que con su decisión de enviar a los compañeros al seguro de paro la Techint quiere aumentar la presión en las negociaciones", agregó Diverio.
Además, "muchos" de los trabajadores en la obra "no tienen el mínimo necesario para recibir el beneficio del seguro de paro", destacó.
Del resultado de esa reunión "dependen las futuras medidas" que adoptará el Sunca "que por ahora no descarta ninguna", incluida la posibilidad de una huelga del sector, agregó el dirigente sindical.
La interconexión con Brasil es considerada "estratégica" por el Gobierno del presidente uruguayo, José Mujica, en la búsqueda de reducir la dependencia de importar electricidad únicamente desde Argentina.
La mayor parte de la energía eléctrica que consume Uruguay es generada por represas hidroeléctricas, pero cuando el consumo se incrementa notablemente es necesario recurrir a la importación.
Una vez que las obras de interconexión con Brasil estén finalizadas, Uruguay podrá importar electricidad también desde su vecino del norte. EFE