París, 26 feb (EFE).- La lucha contra la volatilidad de los
mercados agrícolas y la forma en que los sistemas de ayuda al sector
pueden contribuir a atenuarla y a garantizar la remuneración de los
agricultores ha sido uno de los temas centrales de la conferencia
ministerial de la OCDE que finaliza hoy en París.
El secretario de Estado español de Medio Rural y Agua, Josep
Puxeu, avanzó hoy que una de las conclusiones de los representantes
del más de medio centenar de delegaciones representadas en la
reunión sobre agricultura de la Organización para la Cooperación y
el Desarrollo Económico (OCDE) es que las medidas de apoyo al sector
son necesarios.
Puxeu consideró que la OCDE es una instancia válida para abrir el
debate internacional sobre los mecanismos más adecuados y "darnos
instrumentos", y señaló que con sus colegas de los 30 países
miembros y de los otros invitados en este encuentro de dos días
habían hablado también de la pertinencia de "observatorios de
precios" que sirvan para dar transparencia a los mercados.
En ese sentido, se le ha pedido al conocido como el "Club de los
países desarrollados" que ayude a establecer un mejor análisis de la
relación entre unos mercados financieros muy desregulados y los
mercados de materias primas (alimentos y energía principalmente) que
pierden eficiencia a causa de la volatilidad.
También se ha solicitado que profundice en la forma de garantizar
precios justos a los agricultores frente a fenómenos como la
existencia de oligopolios de la distribución.
El secretario de Estado español puso como ejemplo a la Unión
Europea por la forma de dar respuesta a esas cuestiones, y subrayó
que con las reformas que se han llevado a cabo en la Política
Agraria Común (PAC) desde 2003 hay medidas de apoyo al sector "no
distorsionantes", y también mecanismos para dar transparencia a los
mercados.
Constató que "pocos" en la escena internacional defienden la idea
de ayudas directas al precio de los productos agrícolas.
Puxeu señaló que otra de las conclusiones del encuentro es que
hay "capacidad tecnológica" para responder a la demanda mundial de
alimentos en los próximos años (la FAO augura un incremento de hasta
el 70% en los dos próximos decenios) sin poner en peligro a medio
plazo recursos básicos como el suelo o el agua. Pero puntualizó que
eso requiere poner políticas activas.
La conferencia de París sirvió para constatar los fuertes
disensos entre los países participantes en cuestiones como el uso de
las biotecnologías o el carácter multifuncional de la agricultura, y
la remuneración de los profesionales del sector no sólo en función
de la producción.
La conferencia ministerial de la OCDE termina esta tarde con la
presentación oficial de las conclusiones por su secretario general,
Ángel Gurría, y por los dos copresidentes del encuentro, los
titulares de Agricultura de Austria, Nikolaus Berlakovich, y de
Nueva Zelanda, David Carter.
Puxeu aprovecha su desplazamiento a París para mantener
encuentros bilaterales con los representantes de Brasil, Estados
Unidos y Japón.
Además, mañana asiste a la inauguración del Salón de la
Agricultura de la capital francesa, cuyos organizadores acostumbran
a presentar como "la mayor granja del mundo". EFE