Alba Santandreu
Sao Paulo, 28 ene (.).- La tragedia minera en Brumadinho, en el sureste de Brasil, ha puesto contra las cuerdas al gigante minero Vale, que en un solo día ha perdido unos 70.000 millones de reales (18.617 millones de dólares) de valor de mercado y ha visto su nota de crédito rebajada.
La cotización de la empresa, la mayor productora y exportadora de hierro del mundo, se desplomó este lunes en la bolsa de Sao Paulo en medio de la presión de los inversores tras el desastre ocurrido el viernes, el segundo en el que se ve implicado la minera en poco más de tres años.
Las acciones ordinarias -con derecho a voto- de Vale se desplomaron hoy un 24,52 % en la bolsa de Sao Paulo, que el viernes -día del accidente- no operó por ser festivo en la capital paulista.
"Si las acciones cayeron, es algo totalmente secundario en ente momento", dijo en una rueda de prensa este lunes el director ejecutivo de Finanzas y Relaciones con los Inversores de Vale, Luciano Siani, quien precisó que la minera tiene 200.000 accionistas.
La compañía, que ocupaba la tercera posición en el ránking de empresas brasileñas con mayor valor de mercado la semana pasada, por detrás de Petrobras y el banco Itaú, bajó hasta el quinto puesto tras el desastre.
"El mercado está presionando. Los próximos días deben ser volátiles. Hay mucha gente cautelosa", dijo a Efe Glauco Legat, analista jefe de la corredora Necton.
Tras la catástrofe, la Justicia ha cercado las cuentas de la compañía, que acumula cerca de 12.000 millones de reales (3.180 millones de dólares) en embargos como consecuencia de acciones interpuestas por el gobierno del estado de Minas Gerais y la Fiscalía.
El valor bloqueado por los tribunales, según Legat, supone cerca de la mitad de lo que Vale tenía en caja en el tercer trimestre de este año, lo que puede comprometer la "liquidez" de la firma.
Según el analista, el desastre de Brumadinho deja a Vale en una "posición bastante crítica", aunque precisó que "teóricamente" existen elementos que pueden mitigar la situación y hacer que el escenario "no sea tan pesimista" para el futuro de la empresa.
En ese sentido, resaltó que la mina del Corrego de Fijao, en la que se produjo el accidente, tan solo es responsable por el 1,5 % de la producción total de Vale.
"La compañía consigue suplirlo realizando una transferencia de plantas o haciendo que otras plantas produzcan más para compensar salida de Feijao", subrayó.
No obstante, pronosticó que el gigante minero, que pasaba por un momento "bastante positivo" después de una tragedia similar ocurrida en 2015, "va a continuar un buen tiempo en el lodo".
La agencia de calificación de riesgo Fitch anunció este lunes que rebajó la nota de Vale, con perspectiva negativa, mientras que Standard & Poors (S&P), por su parte, ha puesto la calificación de la empresa en observación.
La rebaja de la nota, según Fitch, refleja la expectativa de que las obligaciones financieras de la compañía serán elevadas tras la catástrofe que ha dejado al menos 65 muertos y unos 300 desaparecidos desde el pasado viernes.
Horas antes de la rebaja de la nota, el director de Vale precisó que la reacción del mercado en estos momentos es un "asunto de menor importancia" y recalcó que el foco está en "mitigar el sufrimiento" de los familiares de las víctimas.
En ese sentido, anunció una donación voluntaria de 100.000 reales (unos 26.315 dólares) a cada familia e informó que mantendrá la compensación financiera que destinaba al municipio de Brumadinho por tener activa la planta, ahora sepultada por el lodo.
Mientras tanto, el Consejo de Administración de la empresa, en una reunión extraordinaria el domingo, suspendió el pago de dividendos a sus accionistas, así como el programa de recompra de Vale de sus propias acciones y el pago de remuneración variable a sus ejecutivos.