Caracas, 30 nov (EFE).- El Gobierno de Venezuela amplió hoy a la producción de empaquetados para alimentos la "ocupación temporal" que inició en 2009 de la filial nacional de la trasnacional irlandesa del papel Smurfit Kappa Group, a la cual ya intervino 1.500 hectáreas de bosques.
"Se está realizando la ocupación temporal de esta empresa para garantizar materia prima para toda la cadena de alimentos y garantizar el suministro de productos alimenticios", dijo hoy el ministro de Industria, Ricardo Menéndez.
La medida no conlleva el control administrativo de la empresa, "porque son los dueños los responsables ante el país de garantizar el incremento de la producción de esta planta", manifestó el ministro en una alocución en la televisión estatal.
Durante unas inspecciones que el Gobierno realiza a fábricas y locales comerciales en la que llama "lucha contra la especulación de la burguesía parasitaria", el ministro dijo que en la filial "se ha detectado un aumento injustificado" de los precios de entre el 166 y el 372 %" en el transcurso de 2013.
La "ocupación temporal" se limitará a que el Gobierno del presidente Nicolás Maduro "estará supervisando" la división de empaquetado y vigilará "que cumpla y que nadie sabotee el funcionamiento de la economía venezolana", explicó Menéndez.
"Lo importante es poner en evidencia cómo a través de la contabilidad de algunas empresas se esconden los valores de producción real y alzan los productos a su antojo, lo que incide en que el ciudadano reciba productos con altos precios que no se corresponden a la realidad del coste productivo", añadió.
El 5 de marzo de 2009 el mentor de Maduro y entonces presidente, Hugo Chávez, fallecido en marzo pasado, anunció la intervención de 1.500 hectáreas de tierras con árboles de Smurfit Kappa Cartón de Venezuela SA, la filial productora de papel de la trasnacional irlandesa Smurfit Kappa Group.
La filial opera en Venezuela desde 1954, donde posee una docena de instalaciones, y pertenece al Smurfit Kappa Group, un gigante del sector del papel con base en Irlanda que opera en 22 países europeos y nueve latinoamericanos, según datos publicados por la trasnacional en su página electrónica. EFE
"Se está realizando la ocupación temporal de esta empresa para garantizar materia prima para toda la cadena de alimentos y garantizar el suministro de productos alimenticios", dijo hoy el ministro de Industria, Ricardo Menéndez.
La medida no conlleva el control administrativo de la empresa, "porque son los dueños los responsables ante el país de garantizar el incremento de la producción de esta planta", manifestó el ministro en una alocución en la televisión estatal.
Durante unas inspecciones que el Gobierno realiza a fábricas y locales comerciales en la que llama "lucha contra la especulación de la burguesía parasitaria", el ministro dijo que en la filial "se ha detectado un aumento injustificado" de los precios de entre el 166 y el 372 %" en el transcurso de 2013.
La "ocupación temporal" se limitará a que el Gobierno del presidente Nicolás Maduro "estará supervisando" la división de empaquetado y vigilará "que cumpla y que nadie sabotee el funcionamiento de la economía venezolana", explicó Menéndez.
"Lo importante es poner en evidencia cómo a través de la contabilidad de algunas empresas se esconden los valores de producción real y alzan los productos a su antojo, lo que incide en que el ciudadano reciba productos con altos precios que no se corresponden a la realidad del coste productivo", añadió.
El 5 de marzo de 2009 el mentor de Maduro y entonces presidente, Hugo Chávez, fallecido en marzo pasado, anunció la intervención de 1.500 hectáreas de tierras con árboles de Smurfit Kappa Cartón de Venezuela SA, la filial productora de papel de la trasnacional irlandesa Smurfit Kappa Group.
La filial opera en Venezuela desde 1954, donde posee una docena de instalaciones, y pertenece al Smurfit Kappa Group, un gigante del sector del papel con base en Irlanda que opera en 22 países europeos y nueve latinoamericanos, según datos publicados por la trasnacional en su página electrónica. EFE