París, 5 may (.).- El consejero delegado del grupo francés Veolia (PA:VIE), Antoine Frérot, confirmó este miércoles que la compra de la mayor parte de los activos de Suez supondrá la integración de la filial española Agbar, a cuyos empleados garantizó que la operación no tendrá "consecuencias sociales".
"No habrá consecuencias sociales", insistió Frérot en una conferencia de prensa telefónica de presentación de los resultados trimestrales de Veolia, al ser preguntado sobre sus planes para Agbar.
Previamente, el ejecutivo había hecho hincapié en que en España Veolia no tiene negocios en el sector del agua que se solapen con los de Agbar.
También había subrayado que la oferta que prepara sobre la también francesa Suez incluye "garantías muy fuertes en términos de empleo" durante un periodo de cuatro años.
El consejero delegado recordó que desde el inicio de su ofensiva para hacerse con Suez han dicho que los activos de Agbar tanto en España como en Latinoamérica son "para nosotros estratégicos" y que "nuestro objetivo es integrarlos en el conjunto del grupo Veolia".
Tras meses de confrontación entre las direcciones de Veolia y Suez, el pasado 11 de abril las dos partes suscribieron un acuerdo que debe concretarse en un acuerdo definitivo el 14 de mayo.
Ese pacto prevé que Veolia lanzará una opa por el 70,1 % que todavía no controla en Suez a un precio de 20,5 euros por acción, superior a los 18 euros contemplados inicialmente. Eso significa valorar ese 70,1 % en unos 9.200 millones de euros.
La opa debe lanzarse en el tercer trimestre y concluirse antes de que termine este año. Dará lugar a un conglomerado de unos 37.000 millones de euros de facturación anual que reunirá la actual Veolia y la práctica totalidad de los negocios de Suez fuera de Francia, que aportarán unos 10.000 millones, Agbar incluida.
La nueva Suez, que quedará reducida sobre todo a sus actuales actividades de agua y residuos en Francia (así como de unas pocas en el exterior), representará un volumen de negocios de unos 7.000 millones de euros.
Las acciones de Suez cotizan en la Bolsa de París a menos de 19,9 euros, netamente por debajo de los 20,5 euros que tiene intención de pagar Veolia, algo que Frérot justificó porque los inversores integran sobre todo el dividendo de 0,65 euros por acción que está previsto que se distribuya en junio.
El consejero delegado reafirmó su objetivo de obtener 500 millones de euros con la fusión, que además debería "crear valor" para sus accionistas desde el año próximo, el primero.
Antes de que eso ocurra, Veolia cree que su ebitda en 2021 crecerá más del 10 % respecto al de 2020, con más de 4.000 millones de euros, y que su facturación será superior no solo a la del pasado ejercicio, sino también a la de 2019, antes de la crisis.