Nueva York, 20 mar (EFE).- Wall Street se descolgó hoy de los máximos alcanzados la jornada precedente y bajó arrastrado por las preocupaciones por nuevas señales sobre una ralentización de la economía china después de que las autoridades del gigante asiático subieron con fuerza los precios de la gasolina y el diesel.
El Dow Jones de Industriales, la principal referencia del parqué neoyorquino, amaneció en rojo y no logró deshacerse de las pérdidas durante el resto del día, con lo que cerró con un retroceso del 0,52 % o 68,94 unidades para acabar en 13.170,19 unidades.
Algo parecido ocurrió con los otros dos principales índices de Wall Street, el selectivo S&P 500 y el índice compuesto del mercado Nasdaq, que retrocedieron el 0,3 % y el 0,14 %, respectivamente.
Los inversores neoyorquinos no encontraron esta jornada estímulos suficientes para poder dar continuidad al rally que acumula desde el comienzo del año, menos de tres meses en los que el Dow Jones se ha revalorizado un contundente 7,8 %, el S&P 500 el 11,76 % y el Nasdaq el 18 %.
Al contrario, aprovecharon un dato macroeconómico algo peor de lo previsto sobre el sector de la construcción en Estados Unidos y el persistente miedo a un "aterrizaje brusco" en lugar de "suave" de la economía china para recoger parte de los beneficios acumulados en estos meses.
En esta ocasión, las preocupaciones sobre China se centraron en la decisión de las autoridades del gigante asiático de realizar fuertes subidas de los precios de la gasolina y el diesel, del 6,4 % y 7 %, respectivamente, para ajustarlos al alza del crudo en el mercado internacional.
El miedo al impacto que puede tener esa nueva subida del precio de los carburantes sobre los consumidores chinos y el sector automovilístico en general también tuvo su impacto sobre la cotización de los gigantes del motor estadounidense, Ford y General Motors, que bajaron el 3,96 % y el 1,18 %, respectivamente.
Igualmente presionó a la baja a las principales bolsas europeas, donde Fráncfort perdió el 1,39 %, París el 1,32 %, Londres el 1,17 %, Milán el 1,05 % y Madrid el 0,28 %, entre muchas otras.
Los inversores neoyorquinos también tenían otras excusas desde el ámbito nacional para decantarse por las ventas, en concreto que el ritmo de construcción de viviendas disminuyó el 1,1 % en febrero y se situó en una tasa anualizada de 698.000 unidades, según informó el Departamento de Comercio.
En cualquier caso, el impacto de ese dato se vio mitigado por las cifras relativas a los permisos de construcción, que son una indicación de la actividad futura y subieron hasta una tasa anualizada de 717.000 en febrero, el nivel más alto desde octubre de 2008.
La unión de esos factores ocasionó que el parqué neoyorquino se olvidara de los máximos que había alcanzado la pasada jornada, cuando el S&P 500 y el Nasdaq tocaron cotas desconocidas hacía años después de que Apple anunció el primer pago de dividendos entre sus accionistas en 17 años.
El gigante tecnológico volvió a dar de qué hablar este martes, esta vez por la polémica que ha generado el sobrecalentamiento del nuevo iPad, del que se han quejado algunos usuarios en internet, aunque el gigante de Silicon Valley ha dicho que la tableta opera dentro de sus "especificaciones térmicas".
Pese a la polémica, Apple avanzó el 0,81 % y encadenó dos días sobre los 600 dólares por acción impulsada por el récord de ventas de su nuevo iPad, del que tan solo entre el viernes y el domingo pasados vendió tres millones de unidades, lo que supone el mejor lanzamiento de uno de esos dispositivos de su historia.
Por otro lado, la tecnológica Oracle acabó con un avance del 1,14 % y en las operaciones electrónicas posteriores al cierre ascendía el 1,79 % después de anunciar que ganó en los primeros nueve meses de su año fiscal 2012 6.529 millones de dólares, el 22,3 % más interanual. EFE