Nueva York, 2 nov (.).- Wall Street abrió con ganancias este lunes y su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, subía un 1,47 %, en un rebote desde su peor semana y mes desde marzo por la segunda ola de covid-19 y los confinamientos en varios países europeos.
Media hora después del inicio de las operaciones en la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones sumaba 389,06 puntos, hasta 26.890,66 unidades, impulsado por grandes cotizadas como Honeywell (NYSE:HON) (3,82 %), Dow Inc (3,47 %), Nike (NYSE:NKE) (2,77 %) o Caterpillar (NYSE:CAT) (2,71 %).
El selectivo S&P 500 avanzaba un 1,42 % o 46,48 puntos, hasta 3.316,44 unidades; y el índice compuesto Nasdaq, en el que cotizan las principales tecnológicas, progresaba un 1,28 % o 139,84 puntos, hasta los 11.051,43 enteros.
Por sectores, destacaban los avances del de materiales básicos (2,74 %), industrial (1,98 %) y sanitario (1,86 %).
El parqué neoyorquino comenzaba la jornada aprovechando para comprar acciones tras las ventas masivas de los últimos días, marcados por las restricciones de movilidad en Europa y el récord mundial de casos nuevos en EEUU, que se encuentra en la recta final de las elecciones presidenciales.
"Podemos ver que hay algunas compras, ya que algunos inversores ven esto como una oportunidad de adquisición por las grandes ventas de la semana pasada", dijo el analista Sean Markowicz, de Schroder Investment Management, a The Wall Street Journal.
Los inversores están nerviosos ante unos comicios en los que el ganador, sea el actual presidente Donald Trump o su rival demócrata Joe Biden, decidirán la respuesta gubernamental a la crisis del coronavirus y la estrategia para salir de la recesión económica que ha provocado.
A un día de las elecciones, ya se han emitido dos tercios de los sufragios de 2016, más de 93 millones, y Biden saca ventaja a Trump a nivel nacional, por lo que sus campañas se están centrando en los estados bisagra que podrían decantar la balanza a un lado u otro en caso de disputa.
En otros mercados, el petróleo de Texas subía a 36,19 dólares el barril; el oro ascendía a 1.890,10 dólares la onza; el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años bajaba a 0,842 % y el dólar ganaba terreno frente al euro, con un cambio de 1,1628.