Lara Malvesí
Nueva York, 15 abr (EFE).- Wall Street se enfrío hoy ante la falta de expectativas generalizadas de que se consigan objetivos concretos para poner fin a la sobreoferta de petróleo este domingo en Doha.
El sector energético fue como era de esperar el principal responsable del retroceso en el Dow Jones y, por ende, en el conjunto del parqué neoyorquino, que no encara precisamente con optimismo la reunión del domingo en Doha entre varios productores de petróleo y la posibilidad de que en esa cita se acuerden medidas para reducir el exceso de oferta en el mercado.
En consonancia, este viernes el precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) bajó un 2,75 % y cerró en 40,36 dólares el barril.
Es la de este viernes la última sesión en los mercados energéticos antes de la reunión de representantes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y de otros importantes actores del sector, como Rusia.
En esta cita se evaluará el acuerdo alcanzado en febrero por Arabia Saudí, Catar, Rusia y Venezuela, que decidieron congelar los niveles de producción, y se estudiará la posibilidad de ampliar este pacto a los principales productores.
Los analistas, sin embargo, piensan que la cita de Doha tendrá sólo relevancia política, y no creen que vaya a haber compromisos para contrarrestar el exceso de oferta en el mercado, un sentimiento que hoy generó descensos en el precio del WTI.
La paciencia de los operadores empieza a acabarse.
El precio del crudo viene marcando de forma casi exagerada los altos y bajos en el parqué neoyorquino, ávido como otros mercados mundiales de señales sobre adónde va la economía.
El petróleo y las decisiones de la Reserva Federal en torno a los tipos de interés se reproducen día tras día como prácticamente únicas variables para la fluctuación de la bolsa.
En menor medida, este viernes también estuvieron pendientes los operadores por otro lado de los resultados de Citigroup (NYSE:C), que retrocedió ligeramente a pesar de que los datos colmaron las expectativas de los analistas.