Emilio López Romero
Nueva York, 11 mar (EFE).- Después de las últimas jornadas de subidas generalizadas en Wall Street, con niveles récord en el S&P 500, los operadores en Nueva York optaron hoy nuevamente por tomarse un respiro y cerraron por segundo día consecutivo con pérdidas.
La principal referencia del parqué neoyorquino, el Dow Jones de Industriales, terminó la sesión con un descenso del 0,41 % hasta los 16.351,25 puntos, con lo que se ha depreciado el 1,36 % desde que comenzó el año.
Por su parte, el selectivo S&P 500 retrocedió el 0,51 % hasta los 1.867,63 unidades, mientras que el índice compuesto del mercado Nasdaq, en el que cotizan algunas de las mayores tecnológicas del mundo, descendió el 0,63 % hasta los 4.307,19 enteros.
Sin nuevos datos económicos de relevancia a los que atenerse, los inversores en Wall Street volvieron a centrar hoy sus miradas en la crisis de Ucrania, mientras que siguieron digiriendo los últimos informes que apuntan a una desaceleración de la economía china.
El Parlamento regional de Crimea aprobó hoy una declaración de independencia de Ucrania y reiteró su aspiración de ingresar en la Federación rusa entre las críticas de las potencias occidentales y el apoyo de Moscú.
Mientras, las autoridades chinas anunciaron hoy su intención de liberalizar completamente los intereses de los depósitos bancarios, algo que supondría un paso decisivo para la reforma de su sistema financiero, aun muy controlado por el Estado.
Nueva York se dejó hoy contagiar por el pesimismo de sus colegas al otro lado del Atlántico, donde las principales plazas financieras cerraron también en números rojos: París (-0,48 %), Fráncfort (-0,46 %), Milán (-0,39 %), Madrid (-0,31 %) o Londres (-0,09 %).
En clave empresarial, uno de los titulares de la jornada vino de la mano del sector textil, donde la cadena de tiendas de ropa para caballero Jos A. Bank subió el 3,87 % después de anunciarse su venta al grupo Men's Wearhouse, que cerró con un ascenso del 5 %.
En otros mercados, el barril de petróleo de Texas, de referencia en EE.UU., cayó un 1 % y estuvo a punto de perder los 100 dólares, mientras la divisa estadounidense recuperó terreno frente a otras monedas como el euro.