Washington, 11 mar (EFE).- El presidente de Estados Unidos,
Barack Obama, lanzó hoy un llamamiento a China para que permita una
cotización más flexible del yuan.
"Que China se mueva hacia un tipo de cambio más acorde a los
mercados representaría una contribución esencial a los esfuerzos
globales" para reequilibrar la economía, afirmó Obama.
Los países "con superávit en su balanza comercial deben aumentar
el consumo y la demanda interna", mientras que las naciones que
padezcan déficits deben "ahorrar y exportar más", apuntó.
El mandatario hizo estas declaraciones en un discurso hoy ante el
Banco de Exportaciones e Importaciones para presentar una iniciativa
con la que espera doblar las ventas de su país al exterior en cinco
años.
Obama ha lanzado en varias ocasiones llamamientos a China para
que permita una apreciación de su divisa.
En febrero, el gobernante estadounidense adelantó en una
entrevista que prevé "negociaciones muy serias" este año, que
posiblemente "serán accidentadas", con China acerca de la cotización
del yuan.
"Mi meta a lo largo de este año es que China se dé cuente de que
también le conviene permitir que su moneda se aprecie, porque
francamente su economía corre el riesgo de recalentarse", declaró
entonces.
China mantiene invariable el tipo de cambio del yuan con respecto
al dólar desde julio de 2008, pese a los llamamientos de EE.UU., que
considera que ese tipo de cambio se mantiene artificialmente bajo
para beneficiar las exportaciones de la República Popular.
Ese país replica que la estabilidad del yuan es su "tarea
principal".
El jefe de la Casa Blanca debe decidir si define a China como un
país manipulador de su moneda en el informe semestral del
Departamento del Tesoro, previsto para el 15 de abril próximo.
Ello podría aumentar la tensión en las relaciones con China, que
ya atraviesan un periodo accidentado debido al anuncio de EE.UU. de
una venta de armas a Taiwán por valor de 6.400 millones de dólares,
y la reunión del mes pasado entre Obama y el líder espiritual
tibetano, el Dalai Lama. EFE