Madrid, 30 nov (EFE).- La atonía de la demanda que la economía
española sufre en este momento de crisis ha provocado que el déficit
exterior se redujera hasta septiembre un 48,01% con respecto al
mismo periodo de 2008, hasta los 42.381,8 millones de euros.
Según los datos publicados hoy por el Banco de España, este saldo
negativo por cuenta corriente se produjo sobre todo por la caída del
déficit comercial, del 51,25%, en un momento en el que el comercio
exterior está muy débil.
Así las exportaciones siguieron cayendo, el 19,8%, aunque fue más
acentuado el deterioro de las importaciones, que bajaron el 29,8%
ante el desplome de la demanda interna.
Para el director de coyuntura económica de la Fundación de Cajas
de Ahorro (FUNCAS), Ángel Laborda, el dato es una señal del "fuerte
ajuste" que ha debido hacer la economía española con la crisis, ya
que antes de ésta el déficit de la balanza corriente alcanzaba el
10% del PIB.
Esa situación era "insostenible y desequilibrada" y daba lugar a
un endeudamiento cada vez mayor "que ha debido corregirse", explicó
Laborda.
Señaló que, en un contexto internacional donde el comercio "se ha
venido abajo" y por tanto han caído las exportaciones, para reducir
el déficit comercial y el corriente no ha habido más remedio que
reducir más las importaciones "a base de ajustarse el cinturón".
Sin embargo, apuntó que gracias a determinadas medidas de
estímulo, como la del sector del automóvil, se observa que el
consumo ha mejorado en los últimos meses, lo que lleva aparejado un
aumento de las importaciones y que la tendencia a la reducción del
déficit comercial "se ha frenado o se ha invertido algo".
Por su parte, el economista jefe de Intermoney, José Carlos Díez,
destacó que las exportaciones en España han caído menos que en
Europa, al tiempo que "frente a todo pronóstico" se han recuperado
"antes y con mayor intensidad".
Por el lado de las importaciones, explicó que la caída de la
demanda interna en España ha sido "más intensa" que la sus socios
europeos, lo que ha provocado una mayor reducción de las
importaciones en este periodo.
Aunque para otros analistas éste sea un dato malo, Díez recuerda
que el 80% de los coches que se compran en España son importados, y
por eso deberían ser otros, como Alemania, los que "llorasen" ante
las menores compras al exterior por parte de los españoles.
En cualquier caso, recordó que ha habido un "tirón" en la compra
de coches y bienes de equipo en el tercer trimestre, que ha hecho
moderar la caída de las importaciones.
Para el experto de Intermoney, otro componente importante que ha
contribuido a bajar el valor de las importaciones ha sido el precio
del petróleo que ha caído "significativamente" respecto a hace un
año.
Según el Banco de España, otra causa que explica el déficit
corriente hasta septiembre, aunque en mucha menor medida, es la
disminución del saldo negativo de las balanzas de rentas, que sumó
21.339,7 millones y de transferencias (7.341,7 millones).
En cuanto a la balanza de servicios, que refleja transacciones de
este sector, como el turismo o la consultoría, tuvo un superávit de
20.146,5 millones de euros, el 5,11% menos, debido a que bajó el
superávit que consigue el turismo.
Con respecto a la balanza de capital, que recoge las
transferencias de capital y las de los activos no financieros y no
producidos (como los derechos de autor o los terrenos), generó un
superávit de 2.653 millones de euros, el 45,12% menos.
De esta manera, el saldo agregado de la cuenta corriente y la de
capital supuso una necesidad de financiación de la economía española
frente al exterior de 39.728,8 millones de euros, cifra
significativamente inferior a los 76.689,3 millones del año pasado,
el 48,2% menos. EFE