BEIRUT (Reuters) - La cifra de muertos por una explosión junto a un convoy de abarrotados autobuses sirios en Alepo ascendió a 126 personas, lo que supone el peor ataque de este tipo en casi un año, dijo el domingo el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
Los trabajadores de rescate sirios de Defensa Civil dijeron que habían retirado al menos 100 cuerpos del sitio de la explosión del sábado, que golpeó a autobuses que transportaban a residentes chiíes mientras esperaban pasar de territorio rebelde al controlado por el gobierno en un acuerdo de evacuación entre bandos en guerra.
El observatorio con sede en Reino Unido dijo que es previsible que el número aumente.
Los muertos eran en su mayoría residentes de las aldeas de al-Foua y Kefraya en la provincia de Idlib, pero entre ellos también había combatientes rebeldes que protegían el convoy, dijo el Observatorio.
No hubo reivindicación inmediata del ataque, que los medios pro-Damasco dijeron que fue llevado a cabo por un atacante suicida.
La principal facción armada de la oposición condenó el atentado, que grupos que luchan bajo la bandera del Ejército Libre de Siria tacharon de "ataque terrorista traicionero".
El papa Francisco, en su mensaje de Semana Santa, se unió a las condenas, describiendo el ataque como "innoble", y pidiendo a Dios que lleve sanación y consuelo a la "querida y martirizada Siria".
El convoy transportaba al menos 5.000 personas, entre ellas civiles y varios cientos de combatientes progubernamentales, a los que se les concedió salvoconducto para salir de las dos aldeas chiíes sitiadas por los rebeldes.
Bajo el acuerdo de evacuación, más de 2.000 personas, incluyendo a los combatientes rebeldes, recibieron salvoconducto para retirarse de Madaya, una población cercana a Damasco asediada por las fuerzas gubernamentales y sus aliados.
El convoy estaba esperando en un garaje de autobuses en una zona controlada por el gobierno en las afueras de Alepo, a pocos kilómetros de donde ocurrió el ataque. Los evacuados de Madaya dijeron que escucharon la explosión.