Por Gabriela Baczynska
BRUSELAS (Reuters) - Los gobiernos europeos son cómplices por las graves violaciones de derechos humanos en Libia a través de su apoyo a las autoridades del país, que a menudo trabajan con personas que torturan y trafican con refugiados e inmigrantes, dijo Amnistía Internacional el martes.
Amnistía dijo que hasta 20.000 personas están retenidas en centros de detención para inmigrantes en Libia y son objeto de "tortura, trabajos forzados, extorsión y asesinato". Otras organizaciones de derechos humanos han dicho cosas similares en los últimos meses.
El apoyo europeo a las autoridades libias forma parte de un plan para reducir la inmigración africana a través del Mediterráneo. Tiene como objetivo reducir el número de personas que se ahogan durante la travesía y rebajar la escala del problema político que suponen las llegadas masivas a los gobiernos de la UE.
Italia ha encabezado el plan, en particular formando y equipando a la guardia costera y gastando millones en apoyar a los organismos de la ONU que trabajan sobre el terreno en Libia.
"Los gobiernos europeos no sólo han sido plenamente conscientes de estos abusos; apoyando activamente a las autoridades libias en frenar los cruces por mar y contener a personas en Libia, están siendo cómplices de estos delitos", dijo John Dalhuisen, jefe de Amnistía Internacional para Europa.
El martes, el primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, defendió la política de la UE en un discurso al parlamento antes de la reunión esta semana de líderes del bloque en Bruselas y dijo que las llegadas por mar habían descendido en dos tercios desde julio pasado.
"Es gracias a nosotros que asoma un rayo de luz sobre los derechos humanos en Libia", dijo, en referencia a los millones de euros que Italia y la UE han gastado en mejorar las condiciones de las personas atrapadas allí.
Un portavoz de la Comisión Europea dijo: "Somos conscientes de las condiciones terribles e inhumanas que algunos enfrentan. Compartimos el mismo objetivo que Amnistía: salvar vidas".