Por Nidal al-Mughrabi y Jeffrey Heller
GAZA/JERUSALÉN (Reuters) - Israel lanzó más ataques aéreos contra Gaza el martes, mientras los palestinos lanzaban cohetes contra el territorio de Israel en el peor repunte de violencia desde la guerra de 2014.
Los combates, en los que desde el lunes han muerto seis palestinos, cinco de ellos milicianos, y un civil en Israel, amenazan con descarrilar los esfuerzos de Naciones Unidas, Egipto y Qatar para negociar una tregua duradera y evitar otro conflicto de gran envergadura en el empobrecido enclave.
Hamás, el movimiento islamista dominante de Gaza, y otras facciones armadas lanzaron más de 400 cohetes o bombas de mortero al otro lado de la frontera después de realizar un ataque sorpresa de misiles guiados el lunes contra un autobús que hirió a un soldado israelí, dijo el ejército.
Se trata de los enfrentamientos más feroces desde la guerra de Gaza de 2014 entre Israel y los milicianos de la Franja. Hamás dijo que estaba tomando represalias por un ataque de un comando israelí en Gaza que mató a uno de sus comandantes y a otros seis hombres armados el domingo. Un coronel israelí también murió en el incidente.
En el puerto israelí de Ashkelon sonaron las sirenas durante la noche, al igual que en otras ciudades del sur en las primeras horas del martes, lo que llevó a los residentes a correr a los refugios antibombas. Varios edificios fueron alcanzados y el ejército dijo que la defensa antiaérea israelí Cúpula de Hierro interceptó más de 100 cohetes y bombas de mortero.
Israel respondió con docenas de ataques aéreos contra Gaza, atacando edificios desde la noche hasta la mañana que incluían un complejo de inteligencia de Hamás y los estudios de la televisión Al-Aqsa de Hamás, cuyos empleados habían recibido advertencias previas de los militares para evacuar las instalaciones.
En los ataques aéreos del martes, el ejército de Israel dijo que golpeó a un escuadrón de lanzamiento de cohetes y disparó a varios palestinos que se infiltraban a través de la valla fronteriza de Israel.
En Gaza, las escuelas, la sede del Gobierno y los bancos cerraron el martes. También se suspendieron las clases en ciudades israelíes cerca de la frontera.
El primer ministro, Benjamin Netanyahu, convocó a su gabinete de seguridad para discutir los próximos movimientos de Israel y el ejército dijo que había enviado infantería y refuerzos blindados a la frontera de Gaza.
Un funcionario palestino dijo que Egipto y Naciones Unidas habían intensificado los esfuerzos con las facciones palestinas e Israel para poner fin a los combates actuales "y evitar una mayor escalada".
(Escrito por Dan Williams y Jeffrey Heller; traducido por Tomás Cobos en la redacción de Madrid)