VIENA (Reuters) - El ministro del Interior de Austria amenazó el miércoles con demandar a Hungría si rechaza volver a recibir a inmigrantes que habían cruzado su frontera común, mientras las tensiones políticas sobre la inmigración crecían antes de las elecciones presidenciales austriacas.
El Gobierno de Austria, que afronta el desafío del ultraderechista Partido de la Libertad, ha acusado repetidamente a Hungría por haber dejado entrar inmigrantes en territorio austriaco pese a que las normas de la UE dicen que los solicitantes de asilo deben permanecer en el primer país del bloque al que llegan.
Hungría, que se prepara para un referéndum sobre si aceptar una cuota de asilo pactada en Europa, ha insistido en que la mayoría de los refugiados entra en su territorio desde otros países de la UE, sobre todo Italia y Grecia, en un juego de reproches mutuos.
"Los países o grupos de países que violan permanentemente la ley tienen que esperar consecuencias legales", dijo el ministro del Interior austriaco, Wolfgang Sobotka, a la radio ORF, en respuesta a una pregunta sobre el rechazo de Hungría.
"En este caso, la República (de Austria) debe demandar. la República debe ver que la UE actúa en corcondancia con la ley y punto", añadió, sin especificar qué medidas legales estudiaba.
Budapest construyó una valla a lo largo de su frontera con Serbia, que no es miembro de la UE, para evitar el flujo de cientos de miles de personas, la mayoría de ellas huyendo de la violencia en Oriente Próximo y el norte de África. Tanto Hungría como Austria han dicho este mes que la situación estaba ahora bajo control.
Un portavoz del Ejecutivo húngaro desestimó el llamamiento de Sobotka en un comunicado enviado por correo electrónico, diciendo que la amplia mayoría de los inmigrantes habían llegado antes a otros países de la UE.
"Hungría no puede y no va a ser responsable ni sufrirá las consecuencias por la conducta irresponsable de otros estados miembro - Austria, Alemania - que sugirieron expresamente ignorar las normas ni por otros países - Grecia - que se negaron a hacer su trabajo", dijo el portavoz.
Alemania y Austria dieron inicialmente la bienvenida a un gran número de refugiados desde Oriente Próximo y Afganistán. Pero Viena comenzó a endurecer sus normas de asilo este año e introdujo un límite anual sobre el número de solicitudes de asilo que acepta.
Las medidas, ampliamente criticadas por grupos de derechos humanos y la Unión Europea, se tomaron tras el aumento del apoyo al Partido de la Libertad (FPO) en los sondeos de opinión, con ventaja sobre los partidos centristas en el poder.
El candidato del FPO, Norbert Gerwald, podría ser el primer jefe de Estado de extrema derecha en Europa en las elecciones presidenciales del 2 de octubre, el mismo día que el referéndum en Hungría.