QUITO, 17 feb (Reuters) - El activista indígena ecuatoriano y candidato presidencial Yaku Pérez dijo el miércoles que no apoyará a su rival Guillermo Lasso en la segunda vuelta electoral y que seguirá exigiendo un recuento de los votos de las elecciones del 7 de febrero.
El escrutinio oficial muestra a Lasso con una estrecha ventaja sobre Pérez, lo que permitiría al banquero conservador avanzar al balotaje del 11 de abril para enfrentar al economista de izquierda Andrés Arauz, un protegido del expresidente Rafael Correa, quien ganó la primer vuelta con un 32,7%.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) anunció la semana pasada que se realizaría un recuento en 17 de las 24 provincias de la nación andina tras un acuerdo entre Pérez y Lasso. Pero los directores del organismo no aprobaron el plan por un desacuerdo sobre cuándo debe realizarse el procedimiento.
"Ni sueñen que nosotros vamos a apoyar a Guillermo Lasso, a la banca", dijo Pérez a periodistas. "Saben que ganamos la elección y que somos los únicos que podemos derrotar a la corrupción".
"No vamos a renunciar jamás a esta resistencia social y la resistencia legal", insistió.
El candidato dijo además que presentará nuevos requerimientos a la autoridad electoral y a organismos internacionales para suspender el conteo oficial y evitar lo que él llama un fraude.
El CNE ha dicho que tardará unos cuatro días más en anunciar los resultados oficiales.
Lasso aceptó el recuento de los votos, pero ha dicho que debe seguir los procedimientos legales que requieren que el consejo electoral anuncie primero cuál de los dos candidatos es el ganador y luego considerar las objeciones al escrutinio.
Pérez, por su parte, quiere que se realice el recuento antes de que se anuncie al rival de Arauz en la segunda vuelta.
Varias organizaciones indígenas anunciaron una marcha pacífica que partió desde el sur del país en respaldo a Pérez y su pedido. Esperan arribar a Quito el próximo martes.
Mientras que Arauz ha defendido el derecho al recuento de los votos de acuerdo a la ley. El candidato dijo el miércoles que estaba en reuniones con inversores y funcionarios del Fondo Monetario Internacional (FMI), para dialogar sobre el acuerdo que firmó Ecuador por unos 6.500 millones de dólares el año pasado.
Arauz ha cuestionado las condiciones de esa financiación y ha dicho a los inversores que buscará renegociarlo.
(Reporte de Alexandra Valencia; Editado por Javier López de Lérida)