AMÁN (Reuters) - Al menos dos mil combatientes rebeldes sirios han vuelto a entrar en Siria desde Turquía en la última semana para reforzar a los insurgentes que lidian con un asalto de las milicias kurdas, dijeron el jueves fuente rebeldes.
Los combatientes rebeldes, con armas y vehículos, han sido escoltados a lo largo de la frontera por parte de las fuerzas turcas durante varias noches, antes de dirigirse al bastión rebelde sirio de Azaz, dijeron las fuentes.
"Nos han permitido trasladar todo, desde armas ligeras a equipos pesados, morteros y misiles y nuestros tanques", dijo Abu Issa, comandante del Frente Levante, el grupo rebelde que dirige el paso de Bab al-Salam, dijo a Reuters hablando bajo condición de anonimato.
"Hay una férrea seguridad en el camino de cuatro horas de un paso fronterizo al otro", dijo, añadiendo que los entre los rebeldes transportados no hay del Frente Nusra y ni de otros grupos yihadistas.
El Gobierno sirio dijo el domingo que las fuerzas turcas estaban entre los 100 hombres armados que habían entrado a Siria acompañados por 12 camionetas con metralletas pesadas, en una operación de suministro a los insurgentes.
La ruta por Turquía se ha convertido en el único camino para que los rebeldes lleguen al enclave de Alepo después de que el ejército sirio cortase la principal ruta al territorio rebelde.
El Observatorio de Derechos Humanos, un organismo con sede en Reino Unido que monitoriza la guerra en Siria, también confirmó que cientos de combatientes rebeldes habían cruzado con armas a través de la frontera hasta Azaz.