Por Marc Frank
LA HABANA, 11 dic (Reuters) - Cuba anunció el jueves que iniciará en enero una reforma monetaria que se esperaba desde hace mucho tiempo, unificando su sistema de moneda dual y el tipo de cambio múltiple en un intento por inyectar más dinamismo a su economía de planificación centralizada.
Las reformas fueron adoptadas por primera vez en un congreso del Partido Comunista hace una década, mientras avanzaba hacia un sistema impulsado por el mercado y nexos más estrechos con la economía internacional. Las reformas se estancaron debido a divisiones internas y la burocracia.
¿CÓMO FUNCIONA EL SISTEMA MONETARIO DE CUBA?
Durante casi tres décadas, dos monedas han circulado en Cuba: el peso y el peso convertible (CUC), ambos oficialmente valorados con una tasa de uno por cada dólar. Tampoco se comercializan fuera del país.
Los tipos de cambio son, sin embargo, de varios tipos: 1 a 1 para empresas estatales, 24 pesos por 1 CUC para el público y para varias empresas mixtas, salarios de la zona especial de desarrollo Mariel y, por ejemplo, para transacciones entre agricultores y hoteles.
Cuba creó el sistema como parte de un paquete de medidas para abrir su economía después del colapso de la Unión Soviética.
Si bien el sistema ayudó a Cuba a superar el impacto del colapso soviético, terminó ocultando también la situación económica real.
¿QUÉ CAMBIA AHORA?
Se eliminará el CUC. El presidente Miguel Díaz-Canel dijo que dejaría el peso a una tasa fija única de 24 por dólar, eliminando otras tasas más favorables en la primera devaluación oficial del peso desde la revolución cubana de 1959.
¡ADIÓS CUC, HOLA DÓLAR!
El Gobierno ha comenzado a abrir una serie de tiendas que venden bienes de consumo por dólares y otras monedas negociadas internacionalmente, aunque solo mediante una tarjeta bancaria.
La Habana sostiene que esta es una medida temporal pero la dolarización parcial también brindará cierta estabilidad, especialmente para las familias que reciben remesas.
Mientras tanto, las empresas estatales y privadas ahora pueden mantener cuentas en moneda negociable con el 80 por ciento de sus ganancias de exportación en lugar de entregarlo al Estado.
¿TERAPIA DE CHOQUE?
La devaluación es inflacionaria, mientras que terminar con los subsidios lleva a despidos. Sin embargo, el gobierno cubano dice que espera evitar cualquier "terapia de choque" en la economía donde el Estado fija la mayoría de los precios y salarios.
Los economistas esperan una inflación de tres dígitos, y el Gobierno ha dicho que la devaluación inicial irá acompañada de un aumento de cinco veces en los salarios y pensiones estatales promedio, cuando muchos precios controlados por el estado también pueden subir.
Pero el aumento salarial no se aplica a alrededor de dos millones de los más de siete millones de la fuerza laboral del sector privado, el sector informal o que simplemente no trabajan.
Mientras tanto, el Gobierno dice que las empresas estatales, por regla general, ya no recibirán subsidios.
El Gobierno añadió que los residentes tendrán 180 días para cambiar pesos convertibles una vez que salgan de circulación.
¿POR QUÉ AHORA?
Cuba busca revertir su peor crisis desde la caída de la Unión Soviética con un crecimiento que se desplomará más del 8% este año con un impulso a las condiciones comerciales y de productividad.
El país depende de las importaciones para más del 50% de los alimentos y el combustible que consume, además de los insumos para la agricultura y los productos farmacéuticos. Sin embargo, una combinación de sanciones estadounidenses, errores económicos locales y la pandemia han destruido la capacidad de Cuba para obtener divisas negociables.
Cuba ha ido acumulando deudas rápidamente en los últimos años, sin dejar de sufrir la escasez de productos básicos, desde alimentos y productos de higiene personal hasta medicamentos y combustibles.
(Reporte de Marc Frank. Escrito por Nelson Acosta; Editado en español por Javier López de Lérida)