Por William James
LONDRES, 11 sep (Reuters) - El primer ministro británico Boris Johnson pretende seguir adelante con un proyecto para regular el mercado interno a pesar de la advertencia de Bruselas de que esta legislación podría arruinar su futura relación con la UE y del reconocimiento por parte del propio Gobierno británico de que viola el derecho internacional.
El proyecto de ley de mercado interno tiene como objetivo garantizar que las cuatro naciones constituyentes de Reino Unido (Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte) puedan comerciar libremente entre sí después de salir de la Unión Europea, pero el Ejecutivo dice que esto requiere la anulación de parte del tratado de retirada que firmó con Bruselas.
La UE ha amenazado con emprender acciones legales contra Reino Unido, y muchos parlamentarios han expresado su preocupación por la posibilidad de que se incumpla un tratado internacional.
¿QUÉ PASA AHORA?
El proyecto de ley debe pasar por ambas cámaras del Parlamento Británico para convertirse en ley, primero por la Cámara de los Comunes, donde el Partido Conservador de Johnson tiene una mayoría de 80 escaños, y luego por la Cámara de los Lores, la cámara alta, donde no tiene mayoría.
El debate comenzará después de las 1430 GMT del lunes en la Cámara de los Comunes, donde se debatirá el principio del proyecto de ley y los legisladores decidirán si debe pasar a la siguiente etapa.
Si se aprueba el lunes, habrá cuatro días más de debate sobre la letra pequeña del proyecto de ley: el martes y miércoles, y luego el 21 y 22 de septiembre. Es probable que haya votaciones sobre los intentos de cambiar la redacción y el sentido de la ley, y una votación final para decidir si pasa a la siguiente etapa.
Si el proyecto de ley es aprobado por la cámara baja, será sometido a escrutinio en la Cámara de los Lores. Este paso no tiene fecha todavía.
¿PUEDE EL PARLAMENTO BLOQUEARLO O CAMBIAR EN LA CÁMARA DE LOS COMUNES?
Sí, pero la gran mayoría de Johnson, ganada gracias a SU campaña a favor de llevar a cabo el Brexit, lo hace difícil.
Cualquier intento de bloquear o alterar el proyecto de ley requiere que sus detractores reúnan una mayoría en el parlamento. Esto requeriría la rebelión de al menos 40 conservadores y que todos los partidos de la oposición se unan en una sola posición.
Resulta difícil medir el alcance de cualquier posible rebelión en el partido de Johnson, pero una enmienda presentada por el legislador conservador Bob Neill está obteniendo cierto apoyo. Neill aspira a que parlamento tenga un veto sobre cualquier decisión de violar el Acuerdo de Retirada.
Los laboristas y otros partidos de la oposición aún no han establecido su propia posición sobre esta y otras enmiendas.
¿Y LA CÁMARA DE LOS LORES?
Muchos miembros de la cámara alta han criticado el proyecto de ley, entre ellos algunos conservadores, pero su papel principal es enmendar y mejorar la legislación, no bloquearla, en principio.
Aunque hay precedentes de que la cámara obstruya la aprobación de leyes, cualquier decisión de hacerlo en este proyecto de ley provocaría una disputa constitucional.
Es más probable que la Cámara de los Lores intente enmendar el proyecto de ley para eliminar o diluir ciertas partes. Las enmiendas volverían a la Cámara de los Comunes para su aprobación.
Si la mayoría de la cámara baja de Johnson se mantiene firme, el proyecto de ley podría rebotar entre las dos cámaras hasta que se encuentre un consenso o el Gobierno intente aprobarlo sin la aprobación de la Cámara de los Lores.
¿PUEDE ECHARSE ATRÁS EL GOBIERNO?
Después de que el Gobierno dijera que estaba dispuesto a violar el derecho internacional, y tras las críticas que ha recibido, es difícil imaginar que se eche atrás sin obtener una concesión o concesiones en las conversaciones con la UE.
El proyecto ha sido descrito como una "red de seguridad" por los ministros, con el supuesto fin de proteger la posición de Irlanda del Norte en caso de que no se pueda llegar a un acuerdo sobre las futuras relaciones con la UE. Llegar a un acuerdo con Bruselas podría permitir al Gobierno abandonar esta red de seguridad.
(Información de William James; editado por Timothy Heritage; traducido por Tomás Cobos)