Por Ju-min Park y Phil Stewart
SEÚL/WASHINGTON (Reuters) - Corea del Sur y Estados Unidos acordaron el jueves que adoptarán rápidamente "medidas punitivas" contra Corea del Norte en caso de que lleve a cabo una provocación adicional, aunque Washington sugirió que las sanciones y la presión diplomática son su prioridad por ahora.
En momentos en que se intensifica la disputa por los programas norcoreanos de armas nucleares y misiles balísticos, Corea del Sur dijo que el despliegue de un sistema estadounidense de defensa antimisiles está avanzando de manera efectiva, pese unas protestas locales y a la oposición de China.
"Ambas partes se comprometieron a que, en el caso de una provocación estratégica adicional por parte de Corea del Norte, se adoptarán rápidamente medidas punitivas que incluirán una nueva resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas" que sea insoportable para Pyongyang, dijo la oficina presidencial de Corea del Sur después de que su asesor de seguridad nacional, Kim Kwan- jin, sostuviera una conversación telefónica con su homólogo estadounidense, H. R. McMaster.
La amenaza nuclear y de misiles de Corea del Norte es quizás el reto de seguridad más serio que enfrenta el presidente estadounidense, Donald Trump. Él ha prometido que impedirá que Pyongyang pueda atacar a su país con un misil nuclear.
Aunque ha advertido que "todas las opciones están sobre la mesa", el Gobierno de Trump dijo el miércoles que busca presionar a Pyongyang para que desmantele su programa nuclear y de misiles balísticos a través de sanciones más duras y la presión diplomática, y agregó que está abierto a negociar.
El secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, el secretario de Defensa Jim Mattis, y el director de Inteligencia Nacional Dan Coats, han descrito a Corea del Norte como "una amenaza urgente a la seguridad nacional y la principal prioridad de política exterior".
La señal de que EEUU tiene la disposición de agotar las vías no militares y viene en momentos en que un grupo de ataque liderado por el portaaviones USS Carl Vinson se acerca a aguas de la península coreana, donde se unirá al submarino nuclear USS Michigan.
Corea del Norte dice que necesita desarrollar armas para defenderse y se ha comprometido a atacar a EEUU y sus aliados asiáticos a la primera señal de agresión en su contra.