MADRID (Reuters) - Dos mujeres de nacionalidad española, una de ellas menor de edad, han sido detenidas en Melilla cuando trataban de cruzar hacia Marruecos para integrarse en una célula del Estado Islámico en Oriente Próximo, informó el lunes el Ministerio del Interior español.
La Policía Nacional detuvo a las dos mujeres el sábado en el paso fronterizo de Beni Enzar, que une el enclave español de Melilla y Marruecos. Una vez allí, pretendían contactar con una red que las trasladara a una zona de conflicto entre Siria e Irak, según Interior.
"Sus intenciones eran las de integrarse en alguna de las células de la organización terrorista del autodenominado Estado Islámico, liderada por Abu Bakr Al Baghdadi", dijo el ministerio en un comunicado.
Esta es la primera ocasión en la que se detiene en España en fase de traslado a dos mujeres captadas para la 'yihad', según Interior, que identificó a una de ellas como Fauzia Allal Mohamed, una melillense de 19 años.
El ministerio destacó también que estas son las primeras detenciones que se producen en España después de que el autoproclamado califa del Estado Islámico hiciera un llamamiento a la 'yihad' el 1 de agosto en Mosul (Irak).
"Uno de los objetivos principales de Al Baghdadi es captar el mayor número posible de combatientes extranjeros, y para ello utiliza varias estrategias como son el establecimiento de una red de captadores, con una dinámica de actuación rápida, controladora y fanática", agregó Interior.
Las redes de captación internacional se encargan de resolver todos los trámites que surjan en el viaje a las zonas de conflicto, facilitan las infraestructuras y establecen una campaña potente en foros y páginas yihadistas en Internet.
"Su proceso de radicalización, su captación y su posterior envío como combatientes estaban perfectamente planificados y organizados por una red que opera en toda la zona del Magreb y que tiene como fin principal seguir obteniendo el mayor número de incondicionales combatientes", dijo Interior.
La Policía Nacional detuvo en junio a nueve personas en Madrid que formaban parte de una supuesta red internacional de captación y envío de yihadistas a Siria e Irak.
Los detenidos, entre los que estaba el jefe de la célula, se encargaban presuntamente de captar a hombres que eran luego enviados a Oriente Próximo para su integración en el grupo integrista Estado Islámico, escindido de Al Qaeda y que está llevando a cabo una ofensiva para hacerse con territorio en Irak.