TOKIO (Reuters) - El Barcelona de Lionel Messi encara como favorito el Mundialito de clubes, una competición un tanto peculiar, que de alguna forma sirve de recordatorio del abismo que separa el fútbol de clubes de Europa del del resto del mundo.
El equipo catalán competirá con el campeón sudamericano, el River Plate, el africano TP Mazembe, el Guangzhou Evergrande de Felipe Scolari y el campeón de Asia y Oceanía, el Auckland City. El Sandrecce Hiroshima, clasificado como anfitrión por Japón, completa el elenco.
El torneo, sucesor de los partidos de la Copa Intercontinental, es tan despreciado e ignorado en Europa como valioso para el resto del mundo.
Los equipos sudamericanos en particular pasan meses preparando y todos los años miles de aficionados recorren la mitad del globo para apoyar a sus clubes.
"Mi sensación es que aunque son fases finales, los equipos europeos creen que van a acabar ganando", afirmó el centrocampista de River Plate Lucho González.
"Cuando empiezan parecen relajados aunque acaban teniendo pruebas más duras de lo que esperaban. Para nosotros sin embargo, este tipo de partidos son como tocar el cielo", sentenció. 2015-12-08T091419Z_1007100001_LYNXMPEBB70E2_RTROPTP_1_OESSP-MESSI-PREVIA-MUNDIALITO.JPG