Por Luis Felipe Fernández y Jordi Rubio
VALENCIA (Reuters) - El barco de rescate "Aquarius" llegó el domingo al puerto de Valencia, una semana después de que Italia y Malta se negaran a dejarlo atracar en sus puertos con 629 inmigrantes a bordo.
El presidente de Gobierno español, Pedro Sánchez, ofreció acoger el barco, lo que conllevó una travesía agotadora de unas 700 millas náuticas adicionales después del rescate de los inmigrantes frente a la costa de Libia.
El "Aquarius" ha llegado a Valencia con 106 migrantes a bordo, después de que dos buques de la guardia costera y la armada de Italia embarcaron a los demás pasajeros para hacer el largo viaje más seguro.
Pero la difícil situación del "Aquarius", dirigida por Médicos Sin Fronteras (MSF) junto con la organización humanitaria franco-alemana SOS Mediterranée, demostró la falta de acuerdo den el seno de la Unión Europea sobre cómo manejar la enorme afluencia de personas que huyen de la pobreza y de los conflictos militares.
En Valencia, funcionarios vestidos con trajes protectores y máscaras blancas dieron la bienvenida a los migrantes mientras desembarcaban y la policía comenzó a identificarlos y procesar su información.
El primer barco en llegar fue el de la guardia costera italiana, que llegó justo después del amanecer al puerto de Valencia con 274 migrantes a bordo.
Un dispositivo de acogida compuesto por 2.320 personas, incluidos voluntarios, traductores y funcionarios de salud, esperaban en el puerto. El secretario general de la Federación Internacional Cruz Roja y Media Luna Roja, Elhadj As Sy, también se encontraba en Valencia para la llegada de la flotilla.
"Esta triste odisea de las personas en el "Aquarius" es otro recordatorio de que todas las personas, independientemente de su nacionalidad o estado migratorio, deberían tener acceso a asistencia y protección básicas", dijo Sy en un comunicado.
"Ningún ser humano es 'ilegal', y las personas que necesitan ayuda deberían recibir ayuda", agregó Sy.
"TRANQUILO Y AGRADABLE"
Médicos Sin Fronteras twitteó una foto de uno de sus equipos diciéndoles a la gente lo que podían esperar.
"La gente está tranquila y contenta de llegar a España", dijo el grupo.
Las siete mujeres embarazadas a bordo de los barcos serán las primeras en ser atendidas, y todos los llegados, incluidos 123 menores, recibirán ayuda psicológica.
Funcionarios del gobierno regional de Valencia dijeron que ninguna de las personas que llegaron en el primer barco mostraban signos de enfermedad grave, pero muchos habían sufrido condiciones de hacinamiento y altas temperaturas en los últimos días.
La xenofobia ha aumentado en Italia, donde más de 600,000 personas han llegado por mar en los últimos cinco años, permitiendo la llegada al poder de la Liga nacionalista en un gobierno de coalición.
En España, las cifras de los llegados en barco aún son muy inferiores, pero están en aumento desde el año pasado. En los últimos dos días, Salvamento Marítimo rescató a casi 1.000 personas y el domingo continuaba la búsqueda de desaparecidos en la costa de Almería después de que cuatro hombres subsaharianos rescatados anoche por helicóptero dijeran que su patera hundida llevaba un total de 47 personas.