Por Steve Holland y Amanda Becker
WASHINGTON (Reuters) - La demócrata Hillary Clinton, de repente vulnerable en la carrera presidencial, está bajo presión para tener una buena actuación frente al Republicano Donald Trump en su primer debate el próximo lunes, un momento que podría ser hasta ahora el más relevante para las elecciones de 2016 en Estados Unidos.
Políticos veteranos implicados en la preparación de los últimos debates electorales presidenciales dijeron que Clinton debería tomar conciencia de cómo dirigir el país en unos tiempos inciertos y marcar el contraste como la alternativa firme y experimentada frente a un Trump sin experiencia en cargos públicos.
Por su parte, Trump necesita mostrar suficiente seriedad para convencer a los escépticos de que está listo para ser el comandante en jefe de la nación, dijeron.
El enfrentamiento de 90 minutos en la Universidad Hofstra de Hempstead, Nueva York, es el primero de tres debates y se celebra en un momento en que la antes clara ventaja de Clinton en los sondeos de opinión sobre la exestrella de televisión se ha evaporado.
La Historia muestra que un solo mal debate puede alterar la trayectoria de la carrera presidencial estadounidense. Los sondeos de Reuters/Ipsos muestran que alrededor de un 20 por ciento del electorado sigue indeciso, una cifra más alta a estas alturas que el 12 por ciento de hace cuatro años.
El debate será la mejor oportunidad para que los dos candidatos, vistos ampliamente como poco fiables por los votantes, entierren las dudas sobre su idoneidad para la Casa Blanca antes de los comicios del 8 de noviembre.